Hoy, si no recuerdo mal, se inicia la campaña
para las elecciones europeas. Creo que, como siempre, es oportuno repensarse el
asunto, aunque sea un poco. La UE ha significado para España y para las clases
sociales trabajadoras un muro, una losa sobre el desarrollo del Estado del
Bienestar. Se han impuesto los intereses de las empresas, sobre todo los de las
multinacionales, y de la banca y sus estructuras financieras, sobre los propios
intereses de las personas. Un claro caso es ver como el BCE maneja los fondos
que lo sostienen, provenientes de los Estados que forman la UE, para cultivar
la especulación financiera de la banca privada en contra de los propios Estados
que lo nutren. Es decir, el BCE deja a la banca privada el dinero a un interés
irrisorio, y estos se lo prestan a los Estados, mediante la compra de deuda
pública, a intereses de mercado que, al fin y al cabo, los marcan ellos mismos
con sus agencias de calificación privadas (léase Standard
& Poor's, Moody's - Moody's Investors Service, Fitch - Fitch Ratings, en Estados Unidos - Reino Unido o la China Dagong Global Credit Rating), donde se
entremezcla capital de muy diversa procedencia para especular y garantizar el
éxito de sus operaciones financieras. Por otro lado, mediante este procedimiento
pueden hacer hincar la rodilla a los Estados que se resistan a su juego, pues
elevan su prima de riesgo y lo atrapan en su deuda. La banca privada domina el
control del dinero y a los bancos centrales. Extraños negocios e intereses
personales se entremezclan entre lo público y lo privado. El servidor público,
elegido democráticamente para servir al pueblo, a la ciudadanía, se acaba
entregando al servicio de intereses superiores, de la mano de las grandes
grupos en la sombra, que dominan la economía mundial y que les beneficiarán con
buenos puestos en sus empresas, excelentemente bien remunerados.
Los Estados, pues, han perdido su poder de
control sobre el dinero que simbolizaría el crecimiento y la productividad de
un país, para caer en manos de los especuladores, que crean dinero y riqueza de
la nada mediante subterfugios financieros. El Nuevo Orden se basa en el poder
del dinero, de la economía, que ha roto fronteras para ir ganando terreno hasta
en los países que no hace mucho decían defender el sistema comunista, como el
caso de China. No se rompen fronteras para defender los derechos humanos, para
implantar un sistema de trabajo digno, una estructura social de libertad y
defensa de los derechos de la ciudadanía, sino que se pretende aprovechar las
diferencias, las desigualdades internacionales, para explotar con bajos sueldos
a los ciudadanos de los países pobres, donde el coste del producto es irrisorio,
pero se le vende al rico a precio de oro. ¿A quién se le roba, a quien paga más de lo
que costó a al que cobra menos de lo que se vendió?
Mientras, para distraer en luchas estúpidas a
la gente, se reafirman las fronteras, los partidos excluyentes, los
nacionalismos, etc. detrayendo la energía de la verdadera lucha para orientarla
a sentimentalismos henchidos de patriotismos. Cada vez suben más en las encuestas
los partidos neofascistas, xenófobos y nacionalistas. Cada vez se proyecta la
frustración de la gente con simbolismos sociales, como el futbol, que acaba
aglutinando el fervor patrio, y recompensa la pobreza, la miseria, el desaliento
y la desesperanza cuando tu equipo gana… qué suerte tener a dos equipos
españoles jugando la final de la Champion ligue. Qué importa la crisis, el
paro, la desigualdad, la pobreza, la mentira política, la corrupción, etc. si
viviremos una jornada épica, donde gente, que cobran sueldo astronómicos, en
algún caso un millón de veces superiores a los que cobra un empleado, se batirán
en titánica lucha por nuestros colores (no importa que sean portugueses, argentinos,
ingleses… si sirven a nuestros clubes). ¿Cómo hemos caído tan bajo? ¿Cómo hemos
llegado a esta mediocridad intelectual que consiente en anteponer valores
estúpidos a los valores reales de la humanidad? Hemos perdido el norte. No
importa que uno sea andaluz, madrileño, catalán, vasco o gallego… francés,
alemán o chino, cuando lo importantes es reconsiderar el sentido de la lucha,
identificar al enemigo real y no al que te pregonan para ocultar sus intereses.
Han sido hábiles. Han colocado la culpa en el
mundo de la política, que la tiene en gran medida, pero han sabido someterlos a
sus intereses hasta presentarlos como chivos expiatorios de sus injusticias, de
sus manipuleos, de sus maniobras para dominar y reconducir la crisis hacia su
propio beneficio. El político se ha dado a ello. Nos presentan programas que no
cumplen, nos manipulan con sus mentiras, nos quieren hacer ver blanco lo que es
negro, nos venden como fin de la crisis el asentamiento en ella. Estamos
saliendo de la crisis, lo dicen los ministros, el presidente del gobierno, porque
ya no se pierde más empleo… ¿hasta cuándo y dónde se podría perderlo? Manejan macrocifras
que es lo que dice cómo va el enriquecimiento de los grupos empresariales importantes,
mas dejan fuera la microcifras, aquellas que denotan la miseria, el sufrimiento
y la pobreza de la gente de la calle. Pero, en el fondo, se empezará a hablar
de fin de la crisis cuando los sueldos se instauren en la miseria
definitivamente, cuando se pierdan los derechos elementales de los trabajadores
y cuando la empresa tenga el contexto propicio para dominar la situación, para
ganar más dinero, para controlar el mercado del trabajo y para imponer sus
tesis de crecimiento en base a las ganancias.
El desarrollo del ser humano ha pasado a
segundo término. Nos están haciendo más egoístas, menos solidarios, más
codicioso y avariciosos, más temerosos de perder lo poco que nos queda, nos
están llevando a la mediocridad para desvestirnos de los ideales que sustentan
el espíritu de los tiempos, para imponer sus esquemas… EL NUEVO ORDEN MUNDIAL
donde el dinero es el puto amo y quien lo domina dominará el mundo. ¿Quién lo
va a tener? Yo creo que si no se toman medidas todo el dinero acabará en manos
de las multinacionales que irán haciéndose con el mercado, tanto el productivo
como el especulativo, tanto empresarial como financiero. El Estado será un mero
elemento de gestión sometido a las normas internacionales donde prevalecerán
los intereses de los amos. Las constituciones se adecuan a ellos, como ya se ha
hecho con la nuestra para garantizar los empréstitos recibidos, mediante le
consenso del PP y del PSOE en la pasada
legislatura. Eso sí, desde la sombra, escondidos, casi en la clandestinidad,
para evitar el debate entre la ciudadanía, a la que no se le explicó lo que podría
significar ese cambio.
Por eso, ahora, me nacen y emanan estos versos
que pueden resumir lo que digo, y que comparto al amparo de la propaganda
electoral que se inicia.
Quintillas para elecciones.
Cansado estoy de aguantar
no te diré de vivir
y mucho menos de amar
pero sí de resistir
a tanto idiota medrar.
Se me acabó la esperanza
de comprender a esta gente
pues colgué de mi balanza
lo que dicen, lo que mienten
por defender su crianza.
Andan con su coalición
diciendo tantas patrañas
que me crean ofuscación
con esas cosas extrañas
que te suenan a traición.
El resultado final
lleva a la desilusión
y me parece fatal
que ganen su votación
en asunto electoral.
Yo no les daré mi voto
les retiro la confianza
que les di en tiempo remoto
pues mataron mi esperanza
con su estilo manirroto.
Por eso mi buen amigo
hemos de cambiar las cosas
y haciendo lo que te digo
les podremos las esposas
que les sirva de castigo.
Vota al que piense primero
en los factores humanos
que se olvide del dinero
y que trate como hermanos
hasta al mismo pordiosero.
7 comentarios:
Me gustan estas quintillas por lo que tienen de popular, de luz e intención social y porque marcan la pauta de lo que debe de hacer con su voto cada cual. Me gustan porque parecen versos que cantan los poetas del Genil, como en nuestra revista de la Agrupación Andaluza San Sebastián de los Ballesteros de Sabadell explica nuestro, creo, común amigo Manuel Galeote.
Te felicito, Antonio, por esos versos tan atinados y bien trenzados y por tu valentía al exponer tus ideas de manera tan clara. Un cordial saludo.
Gracias José. La libertad de expresión lleva a decir lo que se siente, le guste o no a otra gente, pero aceptando las divergencias, como es lógico.
Las quintillas muy propias de los troveros, junto con las espinelas se dan muy bien a la crítica social.
Un saludo
Me uno a tus reflexiones. Para no deprimirme me voy a leer unos poemas de un libro que me han regalado y que me ha dedicado su autor. Gracias Antonio
Un abrazo, José Antonio. Espero que te guste el libro que te han regalado.
Pues sí, estamos en periodo electoral. Tengamos cuidado con lo que nos dicen porque se ponen muy bien puestos para ganar nuestra confianza.y olvidarse despues de lo dicho.. Es más creo aue no habría que oirles nada. Con lo que están haciendo, a donde nos llevan, es suficiente para que cada uno vote en conciencia. Un abrazo, Antonio.
Maria, yo no tengo claro a quien votar, pero votaré aunque sea en blanco. No quiero renunciar a ese derecho aunque no sirva de nada.
Saludos
Yo no sé para qué sirven los periodos electorales, si ya no se cumple nada de lo que prometen, Aprendemos más de la experiencia de verlos gobernar que de lo que puedan decir.
Un abrazo Pruden...
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