Hace más de dos meses que no cuelgo una reflexión de las llamadas ocurrencias. Esta, que he titulado ¿Usted para quien trabaja?, se sustenta en la expresión:
“Robar no es, solamente, hacerse con lo que ya tiene otro, sino evitar que consiga lo suyo”.
La pregunta anterior lleva implícito el hecho de que alguien se lleva los beneficios de tu trabajo. Es decir, que tu rendimiento no repercute en ti en la medida que debiera y otro sujeto, que no ejerce la actividad productora, se beneficia de ella de forma descompasada.
La génesis de cualquier capital desmedido implica el desvío o sustracción de remesas de beneficios hacia el mismo, en detrimento de los otros actores del proceso productivo. Este hecho se justifica al amparo de la inversión y primando el valor del dinero sobre el del propio trabajo.
El sistema, injusto de por sí, entiende que quien tiene capital está facultado para gestionar el trabajo y tiene licencia para establecer los márgenes de beneficios en función del mercado, pero sin valorar que ello tenga que repercutir en los ingresos del trabajador. Es la herencia de la vieja historia de la burguesía como eje social de la economía.
En la revolución industrial fue el capital el motor de las inversiones y de la dinámica productiva. El sujeto solo se limitó a actuar como instrumento o herramienta, nada pensante, sometido a la monotonía de una actividad puramente mecánica. Se me viene a la mente la imagen de Chalot en “Tiempos modernos” cuando sale de la fábrica con el tic adquirido en su actividad en la cadena de producción.
Ahora se ha cambiado el protagonismo del trabajador y la mecánica ha dejado paso a la inteligencia. Por lo que el empresario ya no es el elemento pensante por definición, sino el especulador del capital y el estratega del mercado.
Quiere eso decir que habría que cambiar y/o modificar la relación capital-trabajo; cosa alto improbable por la resistencia del capital a dejar paso, en la toma de decisiones referentes al reparto de beneficios e inversiones, al ejecutor de la actividad productora. En suma, se sigue tratando de un desajuste en la distribución de los beneficios y renta del trabajo productivo, cuando, tanto el empresario como el trabajador, forman parte de la empresa en el sentido productivo. Es tremendamente expresivo que un kilo de patatas valga 2 euros en el mercado y le paguen 30 céntimos al agricultor.
Creo que el gran problema que se está dando en estos momentos en la negociación de los agentes sociales (empresarios y trabajadores) radica en que la empresa pretende, al amparo de su papel clásico en la génesis de empleo, hacerse valer para invertir y crear empleo. Como siempre el dinero manda y quien lo tiene lo administra, incluyendo el chantaje a los gobiernos para que les faciliten el seguir incrementando sus beneficios sin importarles el beneficio colectivo y el compromiso del contrato social.
En conclusión, los capitales no se han fraguado quitándole a otros lo que ya tenían, sino hurtando y evitando que obtenga el beneficio justo que genera su trabajo.
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9 comentarios:
aye leí la entrevista a un cantamañanas que dijo una verdad tremenda cuando sentenció que admiraba a quien había sabido mantener una fortuna heredada y a quien de la nada había logrado con su esfuerzo una fortuna (hablando de ricos legales, no los de la mafia etc)
buen finde
Pues mira Antonio, hoy me han robado dos años de mi vida. Esos que pretende el infame ZP que amplíe mi vida laboral.
Estoy muy harto de este tipejo mentiroso y zafio y no veo el momento de que se vaya a la puta mierda. Y perdona por la expresión.
Hola, Antonio: Interesante reflexión, como todas las que nos has presentado.
Visto así, no sólo los empresarios nos roban hurtándonos los beneficios e impidiendo que levantemos cabeza; lo hacen también los que ceden ante el chantaje de las poderosas compañías y nos suben un 6% la electricidad, el gas y el transporte cuando las pensiones sólo han subido el 1%
Lo hacen también al legislar que se retrase la edad de jubilación porque las arcas están vacías, después de regalar miles de millones a la Banca.
Lo hacen también los que en lugar de buscar soluciones a la crisis laboral y económica que padece el país se dedica a promover referenduns a favor de si las ardillas deben ser rojas y gualdas o con barras tricolores. En fin, mal veo yo el panorama, creo que la socieded española avanza vertiginosamente, tal caballo desbocado a otro enfrentamiento, pues el ser humano padece, y tú bien lo sabes, de la maldita necesidad de comer al menos dos veces al día,y de calentarse y vestirse. Y si esas necesidades no se satisfacen, el ser animal que hay dentro tiende a revelarse.
Ësa es la experiencia que hemos tenido durante siglos.¿Por qué nadie cree que pueda hoy reproducirse?
Un abrazo.
Se roba de tantas maneras querido Antonio que parece ser que de una manera u otra todos seamos un poco ladrones, no obstante hay quien lo sabe hacer muy bien.Petonets.
Como Txema a mi también me van a robar legalmente lo que podría ser el descanso en el trabajo.
Quieren que trabaje más para que otros engorden sus alforjas
Saludos
La única opción que tenemos (creo) es la unión de lo que antiguamente era la clase trabajadora (hoy ya casi extinta) pero no corren buenos tiempos para la lírica. No creo que la clase política sea el mal, pues pienso que no es mas que un reflejo de lo que es la sociedad. Viejos valores (que tu pregonas en tus escritos) como solidaridad, justicia, etc. hoy no son mas que nociones abstractas en los manuales de estudio.
Un abrazo.
...¡Saludos Antonio!
Me llevas a reflexionar sobre la noticia, triste y desvergonzante noticia que nos toco vivir hoy a los puertoriqueños y que le ha dado la vuelta a el mundo en segundos, la de los médicos puertoriqueños que se hicieron miles de fotos morbosas y denigrantes en la tragedia de Haití, y que en lo personal me hace sentir verguenza ajena, ellos, ellos nos robaron junto con los politicos que los llevaron hasta allí la confianza que depositamos en ellos, pues en momentos de solidaridad vienen y se hacen fotos como si extuviesen en Pacha, siento un dolor y una verguenza absoluta como puertoriqueño que soy, eso nos hace preguntarnos para quien trabajan??
Hola Antonio, gracias por tocar estos temas, los medios de comunicación nos muestran una sociedad irreal, no hablan de los problemas reales tal como son, ni los denuncian, quieren que contenplemos las injusticias y desigualdades, como algo normal.
La presión que sufren los trabajadores actualmente es muy fuerte. El otro día me comentaba la cajera de un supermercado, que les controlan hasta la rapidez con que pasan los productos por la cinta, tambien tienen que reponer estanterias, limpiar el super y hacen horas que ni se las pagan, esta chica es joven con estudios superiores, jornada completa, seis dias a la semana, 800 euros.
No se si tengo mucha imaginación... pienso que esta crisis la han creado para presionar más al trabajador y obtener mayores ganancias.
Estamos en un estado de corrupción que apesta.
Saludos, desde Barcelona lluviosa.
Bueno, parece que hay bastante consenso en que el latrocinio es un deporte nacional. Al amparo de esta ocurrencia todavía más.
Hay un viejo refrán muy español que dice: "No me des dinero, ponme donde haya", en clara alusión al mundo político y de la administración del Estado.
No es el político electo el único que se lucra en el ejercicio del poder, sino el funcionariado, al amparo de su poder administrativo.
Esto me lleva a postular que el Estado, por definición, es corrupto. Se inventó, en parte, para ello; para gestionar los injustos impuestos que eran verdaderos robos a mano armada, en beneficio de los reyes, nobles y poderos. Buen tema para el debate.
Gracias y saludos para todos los comentaristas.
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