viernes, 9 de abril de 2010

La larga mano del caudillo


Siempre le vi saludar con la mano en alto, como amenazando con darte un cogotazo si te descarriabas, como advertencia para los que no compartían sus ideas. A la par, sus acólitos también la levantaban uniéndose, en coro intimidatorio, al dictador. La mano era su arma, no la palabra. La mano empuña pistolas, sables y artilugios amenazantes. La mano firma sentencias y órdenes a los lacayos y subordinados. La mano saludo a los fieles y adeptos que se congregan en la plaza para aclamarle. La mano da prebendas a los propios. Con la mano se ata, se deja todo atado y bien atado. La suya era una mano de hierro.

La palabra comunica ideas, posiciones y argumentos, intenta convencer, no matar. La palabra es el instrumento de la democracia, mientras que la mano armada, la de hierro, es el de la imposición y la violencia, el de la muerte. La mano tendida para abrazar a la otra abre el camino del diálogo.

Cuando la mano temblaba parkinsonianamente, aún firmó sentencias de muerte. Y cuando la parca le acechaba a los pies de la cama, retando a los artilugios médicos que le sostenían, reclamó la otra mano, la de Santa Teresa, la incorrupta, para ver si esa le podía echar una manita para esquivar a su hado, para evitar rendir cuentas de las atrocidades.

Él había tenido la garantía de la Santa Madre Iglesia, de sus jerarcas, aunque no de algunos fieles que ya le criticaban, ni de Tarancón y sus muchachos al que gritaban sus huestes: “Tarancón al paredón”; pero mejor no arriesgarse, pues la sangre derramada era mucha, los muertos en la cuneta demasiados y las torturas, tormentos y agravios al pueblo que pensaba diferente, eran incontables. Pero era caudillo por la gracia de Dios, al menos eso ponía en sus monedas, y había iniciado y completado triunfalmente su cruzada. También había realizado la obra magna para crear una basílica sublime, bajo tierra, para que ejerciera de pirámide faraónica. Además ello había permitido que se redimieran los perversos y malignos posesos del diablo que osaron enfrentarse a la reserva espiritual de occidente, al nacional-catolicismo, aquellos rojos y masones que tuvieron la suerte de poder lavar sus pecados con el trabajo sagrado de su construcción.

Pues esa mano, al parecer, lo dejó todo atado y bien atado. La ley de amnistía del 77, elaborada en un proceso de sumisión a sus herederos, amnistió a todos los que “omnihostiaron”, es decir a los que dieron hostias a todo el mundo, al amparo de su régimen. Por tanto, bloqueó la posibilidad de dar cuentas de los hechos, de los “presuntos” crímenes, que en su nombre y el de sus ideas se realizaron.

Lo dejó todo tan atado y bien atado que ahora, cuando un juez intenta iniciar una investigación contra presuntos actos criminales ejercidos por su régimen, a solicitud de las víctimas, se le acusan de prevaricación. Las normas internacionales de derechos humanos dicen claramente que el crimen de desaparición forzada NO prescribe y entorpecer su investigación es un delito, por tanto ninguna “Ley de Amnistía” puede contradecirlas. Para un profano ¿dónde está la prevaricación en este caso? Ahora resulta que el delito prioritario no está en la desaparición y muerte de las víctimas, sino el haber intentado investigarlas… ¡¡¡Dios, qué paradoja!!!

No comprendo muy bien lo que está pasando. No me cabe en la cabeza. No lo veo de sentido común. Me es incomprensible que a un juez se le pueda sentar en un banquillo por haber instruido, o iniciado la instrucción, un sumario para determinar si se ha cometido un delito, máxime cuando es a instancias de los afectados. ¿Es que esa no es la obligación de los jueces? ¿Cómo se puede extralimitar un juez por esta causa? Y, en todo caso, si se desprende que no le corresponde a él esa instrucción, que no es competente en esa materia, ¿no es lo razonable indicarle que lo deje y que sea otro juez el que lo lleve a efecto? ¿No lo ha dejado ya? ¿Dónde está el juez competente que le ha de suplir? ¿O es acaso que no hubo crímenes que esclarecer?

Una democracia que no reconoce la honorabilidad de quien luchó por ella, en una contienda fraticida, siendo aniquilado por el bando rebelde, no es una democracia. Es más, la convivencia que pretende no será posible si no se hace justicia con los afectados. Las heridas no se cerrarán mientras haya recordatorios en las cunetas, mientras el pueblo llano no de cristiana, o la que creyere, sepultura a sus muertos. El pasado es el pasado, lo prescrito prescribió, que yo lo dudo; pero la ética, la moral y el derecho de un pueblo no prescriben. Por tanto es obligación de los jueces, que pretenden la justicia, hacer justicia.

El juez Garzón está en entredicho por parte de un importante colectivo político, al haber instruido sumarios que afectan a influyentes esferas del poder. Ya no es los GAL, el terrorismo de ETA, los narcotraficantes, Pinochet, etc… No olvidemos que no instruyó diligencias contra el batallón Vascoespañol, la triple A y otros grupos de la guerra sucia que abonó el Estado. ¿Por qué no lo haría y sí con el GAL? El señor Rosón Pérez, ministro de Interior de 1980-82, y el señor Martín Villa de Gobernación con anterioridad, se fueron de rositas.

Pero ahora… ¡¡¡Se ha pasado!!! Ha entrado en el caso Gürtel tirando de la manta; ha puesto al descubierto las actuaciones corruptas y mangantes del PP, donde se juntan, diluidos entre su colectivo general, un grupo de descendientes ideológicos directos del régimen del Movimiento. Pero el colmo es que ha querido hurgar en el ayer para sacar a la luz los nombres de aquellos que siguen en el ostracismo de la historia, exhumar los restos de fusilados a pie de carreteras y caminos, de huesos entre olivares, y ponerlos en el sitio que les corresponde. Ha querido, a petición de las víctimas, saber quienes cometieron los delitos, quienes asesinaron, dónde, por qué y para qué.

Entonces, el general, ha levantado su mano y ha indicado a sus hijos ideológicos que acosen al juez y que muestren la trascendencia de su poder. No ha muerto, vive en la memoria de sus defensores y estos han cogido el relevo. Cuan difícil es pasar página cuando no se quiere reconocer la verdad de la historia. Cuando se niega la mayor y se escamotea la justicia. No podemos ni debemos dejar para nuestros descendientes esta falsa historia. Se ha de reescribir de nuevo con la verdad de los hechos.

Los descendientes ideológicos de los falangistas que llevaron las víctimas a la cuneta, aliados con unas manos que, paradójicamente, se hacen llamar blancas, no quieren que les laven las manos de sangre y prefieren que la historia les deje en el olvido, sucias las manos de coágulos ennegrecidos, escondidas a la espalda, para no mostrarlas. Pero que no se preocupen, de lo que se trata es de lavar las manos a través de la ley y dejar la conciencia tranquila. Los que hoy demandan al juez no asesinaron, pero si defienden a los asesinos se hacen sus cómplices. Y es que las ideologías también tienen conciencia.

Si bien la historia no es como nos la cuentan, puesto que el relato está mediatizado por los intereses del poder y de la interpretación del cronista, no podemos aceptarla desvestida de verdad objetiva. La memoria histórica debe ser una reivindicación de todo español que se precie, de todo aquel que quiera comprender lo que pasó para que no vuelva a suceder. Tolero y soporto que hagan santos en la iglesia a sus “mártires”, que hayan alabado y dado honores a sujeto de dudosa catadura, cuando no de conocida y demostrada maldad, durante cuarenta años. Pero a cambio, pienso que es de justicia reconocer que los otros españoles, que lucharon por la democracia y la república, eran gente de bien, honorables y honrados ciudadanos y ciudadanas que lucharon por sus ideales y, por tanto, son merecedores de honores, tanto o más que los del otro bando a los que ya se les ha realzado.

Por tanto, esa larga mano debe ser anulada y dejar que el pasado no condicione el presente, que no manipule la realidad histórica. Las generaciones actuales deben conocer la historia para no repetirla, pero, a la vez, merecen que la actuación sensata de los tres poderes que conforman la democracia, les facilite el encuentro con esa verdad de nuestro pasado reciente. La memoria no se puede perder y menos la memoria histórica.

¿Tendrá la justicia el valor de afrontar definitivamente este problema, de darle una lectura constructiva y esclarecer la historia para cerrar las heridas definitivamente? Es un buen momento para ello, al amparo de las inquietudes del pueblo se pueda cauterizar la fístula del pasado. Con el golpe del 23F se cambió el ejercito, con este caso se debería cerrar la confrontación del 36.

Finalmente, este pequeño poema se lo ofrezco a las víctimas de mi pueblo y de toda España. La foto es la lápida de la sepultura que cerró la herida de Cuevas de San Marcos cuando sacaron a los fusilados de la fosa entre los olivos y los sepultaron en el cementerio. Aquí yacen 15 personas, una de ellas embarazada de siete meses, por lo que su feto también está. La historia de estas muertes merece ser contada y, en su honor, puede que la cuelgue en mi blog más adelante. Esta historia pone los pelos de punta y siembra la necesidad de comprenderse en lugar de enfrentarse.


No se pretende el conflicto

de nuevo entre las españas.

Se está buscando hoy día

que la memoria no caiga

en olvidos de la gente

que por España lucharan.


Que les sepulten con honra,

que reconozcan su talla,

que se curen la heridas

que la injusticia dejara.


Que la memoria que quede

sea la justa y la honrada

para que la historia diga

la verdad de esa batalla.

38 comentarios:

Mercedes Pinto dijo...

Pero vamos a ver ¿confiamos o no en la justicia? Porque yo ya no entiendo absolutamente nada. Que conste que no tengo nada en contra ni a favor del juez Garzón, aunque no se acordara de una de mis tías abuelas, a la que quemaron en un convento los republicanos, creo que estos tampoco han pagado.
Espero de verdad que la justicia sea justa con él, y ojalá salga bien parado de todo eso.
Un abrazo.

Josep dijo...

Hola Antonio.
Con Garzón a veces no he estado de acuerdo con algunas de sus cosas. Pero ahora si.
El estar acusando al único juez que fue capaz de instalar tribunales especiales para juzgar a los violadores a los derechos humanos y que, gracias a él, ningún dictador puede andar suelto por el mundo, sólo me parece una maniobra del fascismo español.
Entre muchas cosas pienso que es muy injusto que la parte que venció pero que jamás convenció, haya tenido desde el 1939 tiempo de enterrar a sus seres queridos -como personas que eran- y los republicanos no lo tengan, habiendolo pagado de sobras.
Un saludo.

Felipe Medina dijo...

Genial Antonio.Con razocinio y con mucho corazón

Mientras los insepultos se mantengan en las cunetas o en los descampados España no gozará de una verdadera democracia y en cualquier momento el señor del dedo puede despertar de su sueño y señalar

Un abrazo y una entrada necesaria

Eastriver dijo...

Muy bien Antonio. En el fondo estoy de acuerdo totalmente. Yo me declaro un alucinado más por todo cuanto está pasando. Y uego está la forma que utilizas, la mano, la larga mano, la mano que tiembla, la mano que firma, la mano de la santa... mucha mano por ahí. Las manos que vinieron luego. Nos han vendido, Antonio. Es para temblar.

mariajesusparadela dijo...

No, no confiamos en la justicia, con lo que se está viendo ultimamente.
Y si los republicanos no han pagado, despues de ser insultados durante cuarenta años, recluídos, hecho trabajos forzados, exilados insultados (rojos, cáscara amarga) y sus esposas, rapadas al cero, de verdad, no sé quien pagó...

Belkis dijo...

Hay manos que siguen actuando a pesar del tiempo y la distancia y estoy de acuerdo contigo en que esas manos deben ser anuladas para que el pasado no condicione el presente. La historia no debe repetirse. La justicia y la equidad deben primar ante todo. Como siempre, tus análisis son certeros y ricos en aportes.
Un cariñoso saludo Antonio

Peter Pantoja Santiago dijo...

"Que les sepulten con honra,
que reconozcan su talla,
que se curen la heridas
que la injusticia dejara".


Estas letras marcan lo pasado y lo actual, marcan la historia, marcan el ritmo, pero a su ves reflejan Antonio, el temor de una España que no desea retroceder ni para tomar impulso, pues lo vivido bajo el franquismo queda latente en la historia escrita con sangre y con dolor, así que una ves más, queda el temor en venas por la "justicia", no creen, no creen, porque está el temor, queda el miedo a que esas manos negras se vuelvan a colar en los juzgados y demás. La sombra del lamentable franquismo, siempre revoloteará en aquellos cuya mentalidad aun queda presente en esos cargos de mayor relevancia en la España de hoy día, y claro está, que desean entorpecerle el camino a aquellos que representan la justicia verdadera y el porvenir de la patria.

Así que esas letras que haz mensionado hacen eco a los que ya no estan y su partida fue adelantada, pero gritan todos los días desde sus tumbasm justicia y libertad,

Abuela Ciber dijo...

Un lujo leerte

Saludos y buen fin de semana!!!

Circe La Hechicera dijo...

Querido Antonio, muy sentido, en el largo camino de hacer justicia, se cometen muchas injusticias. Y me encantarìa opinar sobre lo que has escrito, pero serìa un acto de ligereza porque aunque sè el contexto, se me escapan muchos detalles para poder emitir una opinión. Te agradezco tus comentarios y tu preocupación sobre las cosas, tan penosas y tan graves que ocurren en mi paìs, estamos sin rumbo y en manos de alguien que no sabe que lo ha sembrado tambièn puede ir en contra de èl. Te he leìdo y te sigo leyendo, pero soy vìctima de las ocupaciones que atentan con el tiempo. Siempre un placer leerte, porque haces grandes aportes a mi conocimiento. Feliz fin de semana y te mando un beso enorrrrrme!!!

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Buenos dias antonio. vamos por partes:
1. es un lujazo leerte por lo bien que expresas lo que quieres decir, con sencillez, claridad y directos al grano; un texto sin fiuras.
2. Garzón, personalmente, es un tío que lo miro con lupa; lo de USA me dejó plof.
3. no es justo que le sienten en el banquillo precisamente por la causa franquista, ni de coña.
un besote y sigue diciendolas cosas de frente, un besote

m.eugènia creus-piqué dijo...

No hay justicia querido Antonio, la comunidad internacional se pone las manos a la cabeza por lo del juez Garzón, y aquí quedamos todos como imbéciles totales, mientras las mayoría de jueces sean de una derecha cromagnona como son los de ahora la cosa va a ir mal,no creo en la justicia, no creo en la imparcialidad de los jueces. es una vergüenza todo lo que está pasando y estamos quedando como un país tercermundista o peor.Besos.

JUAN PAN GARCÍA dijo...

"La Justicia es un cachondeo", exclamó hace años el alcalde de Jerez, Pedro Pacheco, y fue llevado a juicio por ello.
Pero yo, desde siempre, he pensado lo mismo.Es más, digo que es una mierda de justicia la que impera en España, y lo que sucede ahora con Garzón lo demuestra: El juez que hizo posible que se juzgara a criminales militares annistiados argentinos y chilenos es procesado y relevado de su carrera como Juez por intentar descubrir la verdad en España.
El mismo que fue encumbrado hasta los cielos por la derecha cuando perseguía a los policías del caso GAL y otros políticos corruptos, es ahora atacado por la misma derecha porque está investigando la corrupcción actual y los crimenes del régimen anterior.

Gracias a Garzón, en Argentina fue posible sentar en el banquillo a los asesinos, a pesar de que el primer Presidente democrático,Raúl Alfonsín se bajara los pantalones ante los poderes militares y sacara la Ley de Punto final, annistiando con ella a todos los asesinos.El juez Garzón en todos aquellos casos internacionales que persiguió lo hizo convencido de que "El crimen no tiene fecha de caducidad".
Pero como bien dices, en España el brazo de Franco es alargado e inmortal, y aún dirige los destinos de este asqueroso país donde la mayoría de la gente se alza de hombros y sólo se preocupan de quién ganará esta noche en el Bernabeu.

Un placer leerte, Antonio.
Un abrazo.

Ciberculturalia dijo...

Como dice la albuela Ciber, querido Antonio es un lujo leerte.

Esa terrible mano que tanto daño ha hecho y cuya sombra alargada sigue ahí actuando y moviendo hilos. Ahora es más evidente que nunca. Por eso hay que gritar, posicionarse, actuar para desenmascarar a todas las manos fascistas que nos rodean.

Buen fin de semana y un beso

MarianGardi dijo...

Antonio, viva tu claridad y tus ganas de poner los puntos en las ies, justamenete como debe ser (cuanto hay que tragar por unas u otras cosas)tenemos la garganta profunda de tanta mierda que nos meten si no es política, es consumo, si no, iglesia, si no, corrupción, si no, pedofilia, si no, crisis, si no, guerras, si no, clases sociales, si no, abusos, ya para rematar el otro día me dicen que los premios literarios los consiguen quienes tengan mas amigos en el jurado, mierda y mierda, que pestazo.
Lo de Franco fue como todos los dictadores: "En mi casa mando yo y tú dices lo que a mi me interesa oír".
Lo de Garzón es abuso de poder y querer quitarlo de circulación, A mi siempre me cayó bien y he votado por él.
Ve una tanta basura que apestan.
Tu sigue destapando que recordemos todo el atraso de mentalidad que llevamos con otros países europeos, aquí aún parecemos eso que decían los franceses en época de Franco, que Europa terminaba en los Pirineos.
Besos

Myriam dijo...

LO que pasa, querido amigo, que el Juez Garzón ha demostrado tener un valor como pocos invetigando crimenes de lesa humanidad en España y en el extranjero: (Argentina y Chile) y ha destapado la olla podrida de la mafia con el caso Gurtel.

Quizás haya cometido algún "error" técnico procesal, pero dudo que lo haya cometido en su interpretación de la ley. Por eso, en todo caso, dedería ser únicamente sancionado y d eninguna manera inhibido de sus funciones.

Me pregunto. si en vuestra Constitución en el art. 24 está escrito que cualquier persona "tiene derecho a utilizar los medios de prueba pertinentes para su defensa" porqué en este caso y según se ha dado a conocer en la prensa, no le permiten al Juez Garzón que Juristas de talla internacional declaren?

Mi conclusión es sencillamente, la de que GARZON, es demasiado Juez para España.

Un abrazo

roxana dijo...

estas cuestiones politicas me dan ganas de vomitar!!!!!!!!!!!!! hipocresia total!!!!!!!!!!!!!!!!!!! ya nada se entiende!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
un beso

Anónimo dijo...

Está claro que toda esta lamentable situación es una campaña de desprestigio, acoso y derribo montada en contra del juez Garzón, aquel que era un semidiós cuando investigaba los GAL, el mismo. Que habrá errores de tipo procesal no lo pongo en duda. Pero lo que es evidente es que el mayor error del juez es meterse con el franquismo y la derechona cavernaria que esta vivita, coleando y como dices, Antonio, alzando sus manos "blancas" (tiene tela el nombrecito).
Como sabes, me encanta el carnaval de Cádiz, y este año le han dedicado una letra a este tema de Garzón. Por cierto, en el programa de Curry Valenzuela en Telemadrid (Alto y Claro), tuvieron la caradura de poner trocitos del mismo y hacer como si fuera una crítica al juez... lamentable.
Éste es el enlace:
http://www.youtube.com/watch?v=a7-PGTeCCBE

Anónimo dijo...

Por cierto, que ya me iba sin firmar jeje


Eloy

Antonio dijo...

Queridos amigos y amigas comentaristas, hoy es un día muy especial para mí. Ayer nació mi nieta, a la que llamarán Carmen, y eso ha ocupado casi todo mi tiempo. Por eso, y como ha sido comentado el tema, solo me queda agradeceros las aportaciones que habéis hecho y la casi unanimidad que se ha dado en el tratamiento del mismo.

Gracias Joseph. La parte que venció por las armas no convenció con la palabra sino con el miedo, la opresión y la imposición. La democracia debe juzgar esas cosas que fueron atentados contra ellas y el pueblo soberano.

Felipe siempre pones el punto sobre la i. Sabes dar el justo toque a las cosas para hacerlas de sentido común.

Ramón, la venta se produjo, posiblemente, en la transición, pero ahora, al cabo del tiempo, es el momento de aclarar las cosas sin estridencias y visceralidades. Es la forma de neutralizar la mano negra, que se dice blanca, para esconder la suciedad de la sangre y hacerse pasar por limpia.

Antonio dijo...

María Jesús, cada día se confía menos en la justicia porque muchos españoles empezamos a tener espíritu crítico y sentido común, lo que da criterio de justicia social. Cuando la justicia no tiene criterio de justicia social deja de ser justicia para convertirse en aplicación de leyes injustas.

Belkis, si la mano del pasado rige el presente es que no somos suficientemente maduros, adultos e independientes para dirigir nuestra sociedad actual, para gestionar nuestro destino. Por tanto creo que debemos reivindicar nuestro protagonismo y clarificar el pasado para neutralizarlo.

Peter, gracias por escoger estos versos de mi poema. Son muy precisos de lo que quiero decir: Que los sepulten, que los reconozcan y que se curen las heridas de la guerra… El resto del comentario es preciso.

Abu, tus palabras son un aliciente para seguir escribiendo.

Antonio dijo...

Circe. Sé tu preocupación por lo que ocurre en tu país y entiendo que, manejando el razonamiento crítico del que haces gala, comprenderás nuestra situación histórica en todos sus términos.

Mariángeles, efectivamente Garzón ha hecho muchas cosas y en alguna se habrá equivocado, pero lo que planteas es cierto, no se entiende que lo sienten en el banquillo por la causa franquista.

Geni, no deja de ser curioso que la comunidad internacional vuelva a ponerse las manos en la cabeza por como se actúa en este caso en España. El análisis que se hace desde fuera me merece respeto, en tanto no es de implicados en el conflicto de la guerra civil de forma directa. No es un análisis de parte.

Antonio dijo...

Juan, es curioso, ahora Argentina, agradecida, nos quiere devolver el favor juzgando ellos los crímenes de lesa humanidad del franquismo. Algo se mueve desde la globalización que puede dar como resultado que el proceso iniciado por Garzón se lleve a término, aunque sea en el extranjero. ¿Tendrá que cortar el brazo una sierra de importación porque las de fabricación nacional no saben, quieren o pueden hacerlo?

Carmen, bajo mi opinión, el problema de la transición fue la simulación del haraquiri que hicieron los franquistas y sus descendientes ideológicos. Eso fue un teatro para preservar el poder dentro de las estructura del estado. De aquellos polvos vienen estos lodos.

Antonio dijo...

Marian, tu comentario es preciso y claro. No se le puede objetar nada, solo alabarlo. Ahora solo nos queda intentar que esa basura no se expanda más y que nos deje respirar aire menos contaminado en el entorno ciudadano.

Myr, interesante conclusión, aunque yo no la comparto en su totalidad. Lo que necesita España es jueces como Garzón, que busquen el crimen y lo combatan, sea de ETA, narcotráfico, lesa humanidad, guerra sucia, corrupción, etc. El problema, tal vez sea que el entramado español es mucho para Garzón y solo se resolvería si hubiera muchos garzones en la judicatura, pero haciendo las cosas bien de forma y fondo.

Roxana, es cierto que muchas veces las cuestiones de política dan nauseas, pero lo malo es que se generalicen. Eso pretenden los que buscan salvadores de la patria, desacreditar la política para imponer soluciones extrademocráticas. Creo que se ha de exigir limpieza y honradez a los políticos y si no se hace es que los corruptos y sucios son los que les votan. Al fin y al cabo, en la democracia, el político es el representante o depositario de la soberanía del ciudadano que le votó. El político no debe ser nada si no se le dota del poder delegado del pueblo soberano.

Eloy, ya intuía que eras tú el anónimo. Solo decirte, admás de manifestar mi acuerdo con tu comentario, que vi el enlace que pones y no tiene desperdicio.

Antonio dijo...

Mercedes, te he dejado para el final por ser la única que, de alguna forma, difieres en lo que se ha expuesto. La respuesta te la hago en dos partes.

Primero aclarar que hay dos vertientes importantes para cuestionar o analizar la impartición de la justicia. Por un lado está la legitimidad que las leyes tienen desde la justicia social y del sentido común. La justicia se hace aplicando las leyes, pero estas pueden no ser justas. Había y existen aún en muchos países leyes injustas, como se dieron en el propio franquismo.

Después está la forma y criterio que usa el juez al respecto. Es obvio que no todos los jueces dictan la misma sentencia ante un mismo hecho. Claro, dirás, es que para eso están los recursos. Cierto, pero eso no quiere decir que en las esferas superiores no se vayan a dar las mismas circunstancias de diversidad de criterio que en las inferiores. Entonces recurren a los votos del jurado y se determina por mayoría. Es decir, es el criterio de la mayoría el que prevalece. Eso quiere decir que no son justos para los que no votaron en ese sentido.

Una vez, ante un juicio, pregunte a mi abogado cómo veía la posibilidad de ganarlo y me respondió: Depende del juez que nos toque. A pesar de todo, tengo que confiar en la llamada justicia, pues es la única forma que tenemos de establecer el orden en un sikstema democrático. Eso no quiere decir que no la critique en sus justos términos de libre opinión. Al fin y al cabo, la justicia debe emanar también de la soberanía popular, a través del legislativo elegido en votación universal y directa.

Antonio dijo...

Luego, Mercedes, me gustaría manifestarte mi más sincero pesar por lo que ocurrió a tu tía abuela en la quema del convento. Seguramente durante la etapa franquista se le harían honores, se le reconocería el martirio por su religión y, posiblemente, el propio papado la eleve a los altares o a beata. Los que la quemaron debieron morir en la guerra, o fusilados en la posguerra a manos de los vencedores, o pagar con sus huesos en la cárcel el hecho asesino… merecidamente, en caso contrario debieron burlar la justicia durante 40 años y/o exiliarse.

Pero si observas, la segunda víctima de la lápida que coloco se llamaba Concepción (precioso nombre dedicado a la Virgen Inmaculada) y estaba embarazada, concibiendo en su seno una vida que no debía abortarse. Pues bien, Dª Concepción Hidalgo Porras (coincide con mi apellido), de 33 años, fue a intentar rescatar a su marido de la muerte a manos de los falangista, pensando que si estos creían en Dios y se declaraban seguidores de la fe católica, comprenderían su estado de gestación y no dejarían a ese niño sin su padre… Craso error, abusaron de ella delante del marido y la mataron también. Los asesinos y violadores siguieron viviendo, seguramente muy orgullosos de su hazaña, como héroes de la cruzada.

Ella y el resto, entre los que había un niño de 16 años además de tres hermanos (qué dolor para esa familia, tres hermanos muertes gratuitamente por unos desalmados), fueron enterrados entre el olivar y olvidados, pues nadie de su familia podía rendir homenaje a estos muertos proscritos por el régimen sin ser acusados de rojos y traidores a la patria y marcados como tales. Eso en la posguerra era muy duro, tanto que te quedabas sin trabajo y tenías que humillarte hasta extremos indecibles para conseguir un jornal. Cuanto dolor y pena, sabiendo que tu familiar estaba enterrado en la cuneta, y no pudieras llevarlo al cementerio con sus antepasados y a la sombra del recuerdo. Pero el campo santo era para los que habiendo servido a Dios pudieran llegar al cielo, pero los rojos, suicidas y demás no podían enterrase en ese campo, ellos no tenían las puertas del cielo abiertas, eran enemigos de l areligión, y allí solo podrían corromper a los santos difuntos. Vaya forma de ver la religión... y antes de matarlos le ofrecían la confesión.

Ahora, amiga mía, lo que se pretende es lo que planteo en los versos finales que dedicó a los asesinados por el régimen de Franco y que te invito a releer. Yo creo que todas las personas de buena voluntad, creyentes o no, estarán de acuerdo en honrar a los muertos, como mínimo. Para ello, para honrarlos, es imprescindible dilucidar las cosas y dejar meridianamente claro lo que pasó. Hoy solo deseo que mi nieta recién nacida nunca se encuentro con otra situación como la que se dio, que la convivencia ciudadana se imponga desde la justicia restañando las heridas del pasado. Igualmente deseo que, si existe el cielo en el que creía tu tía, ella se encuentre allí.

Un abrazo y gracias por tu comentario.

JUAN PAN GARCÍA dijo...

¡Enhorabuena, abuelo!
Te he dedicado una entrada en mi blog. Besitos a Carmen y abrazos para ti.

MAMÉ VALDÉS dijo...

Cuando aún la Memoria Historica no es ni siguiera pasado sino presente, porque sigue reciente en nuestras mentes, cuando aún no se perdona ni se olvida, cuando los ganadores también perdieron y los vencidos perdieron dos veces, finalizada la miserable contienda, irremediablemente la libertad se tiene que refugiar en las trincheras, un saludo.

Antonio dijo...

Gracias, Juan, por tu entrdada. La visité y me ha encantado el poema y la voz y forma en que el rapsoda lo recita junto a esa maravillosa guitarra que saca emociones desde los profundo, desde el sentimiento.
Te dediqué un poema propio, para ti.
Un abrazo

Antonio dijo...

Amigo Mamé, creo que cuando la libertad está en las trincheras, también está secuestrada y en la cárcel presa.
Un abrazo

LUNA LLENA dijo...

Antonio, felicidades para tí y toda tu familia por el nacimiento de tu nieta Carmen.

Es cierto, no ha habido justicia para los asesinados por el franquismo, el juez Garzón se enfrenta a un poder que en la sombra pesa y mucho, los ciudadanos pobres mortales manipulados poco podemos mover.

Para mí el peor crimen del franquismo, fue permitir que aviones extranjeros vinieran a bombardear las ciudades españolas, horrible crimen contra la población civil.
Antonio, aunque suene romántico se necesita perdonar, para poder vivir en Paz, no me gusta la situación de enfrentamiento continuo de estos políticos que al final solo persiguen el voto. Es mi modesta opinion.

Yo tengo tambien una nieta de cinco meses,seria mejor mirar al frente curar las heridas del pasado, sin olvidad puesto que de los errores se aprende, para que Carmen y Thelma no tengan que arrastrar el estigma de las dos Españas.

Un abrazo

Peter Pantoja Santiago dijo...

...Antonio:

¡ENHORABUENA!


Si ese de nombre Carmen de seguro será un ser humano bueno, mi madre se llama Carmen, asi que vienen ya benditas y especiales!!

Me alegra que te disfrutes esos momentos plenos de la vida!!

Peter

Myriam dijo...

Pués eso, querido amigo, ESpaña NECESITA MUCHOS GARZONES y ojalá los consiga en forma y fondo.

¡Enhorabuena por CARMEN y paso a felicitare en la entrada siguiente!

Myriam dijo...

Y no sólo ESpaña... ¡EL MUNDO!

UN fuerte abrazo (fuí interrumpida cuando te estaba enviando el mensaje anterior)

Antonio dijo...

Hola Luna Llena. Aportas una cuestión interesante. El concepto de perdón. Yo entiendo que el perdón se da cuando la afrenta se intenta reparar. Es decir, el ofensor muestra arrepentimiento por lo que ha hecho y el agraviado perdona con un sentido humanista de la vida. Por tanto, para perdonar ha de haber reconocimiento del hecho y eso solo se hace desde la justicia y el reconocimiento a los afrentados. Mientras no se haga justicia, mientras las muertes sigan en las cunetas, mientras no se les reconozca que lucharon por su causa justamente, no habrá posibilidad de perdón final, puesto que persistirá la injusticia flagrante. Eso deberían saberlo los ofensores.
Un abrazo

Antonio dijo...

Peter, gracias por tu felicitación. Ser abuelo es una de las cosas más maravillosas que le puede pasar a un sujeto en el declive de la vida. Es como garantizar la continuidad de uno mismo.
Un abrazo

Antonio dijo...

Myr, yo ando contento con la iniciativa de la demanda en los juzgados argentinos sobre los crímenes del franquismo. Espero que se haga justicia aunque sea desde fuera, aunque preferiría que se hiciera dentro de España, de esa forma todo queda resuelto entre nosotros y puede que vuelva la calma y queda la justicia rehabilitada.
Un abrazo

Elisa dijo...

Hola Antonio: Aunque hace tiempo que no comento nada, sigo pasando por aqui de vez en cuando. Pertenezco a una generación que ya nació en democracia, y a veces tengo la sensación de que este tema no me compete, pero creo que la democracia en este pais es cosa de todos ¿no? En fin, espero no ofender a nadie con mi opinión. Puede que durante la república se cometieran errores, puede incluso que no funcionara bien (yo no lo sé), pero era un régimen democrático. Este primer punto me parece fundamental, porque implica que quien no estuviera de acuerdo con como se estaban haciendo las cosas podía votar para cambiar el gobierno.
En segundo lugar, se que hubo muchos crímenes antes de la guerra (a un primo de mi abuela le mataron saliendo de misa, estando ella a su lado) y obviamente también los hubo durante la guerra, muertos asesinados por el bando republicano. Pero estos muertos fueron homenajeados durante más de 35 años por un régimen que se impuso, por las armas, a todos los españoles.
Yo nací en 1981; no viví la guerra, ni la dictadura, ni la transición a la democracia. Pero tengo la sensación de que me han contado una gran mentira, porque a mi me dijeron que todos los españoles estuvieron representados en la transición. ¿Todos? Existen muchos muertos, muchos familiares, que no han sido defendidos y que hay quien pretenden que olvidemos.
Muchos españoles sufrieron y murieron por culpa de la guerra y del franquismo ¿es que no podemos recordarlos a todos? ¿es que no tienen derecho los familiares a saber donde están sus padres, sus abuelos, y enterrarlos en paz?
Yo no he conocido la guerra ni el miedo, pero si he conocido a personas que aun tienen miedo de que españa se rompa de nuevo. Y creo que hasta que los muertos no descansen en paz no se podrán cerrar las heridas.
Por último me gustaría añadir que me parece admirable el trabajo del juez Garzón, porque seguramente el sabía lo que podía ocurrir, y con este tema se está jugando su carrera. Me parece que lo que está haciendo es muy valiente.

Antonio dijo...

Mi querida Elisa, creo que es obligación de cada generación el dejar constancia real y justa de la historia que les tocó vivir. Ahora, alguien, no quiere que la generación de la guerra y la posguerra deje clara su historia para que la conozcan en verdad las generaciones venideras. La mentira no se puede permitir. No se trata de juzgar y castigar a los culpables, que se lo merecen, sino de decir la verdad de lo sucedido. Creo que vosotros os merecéis que no se os engañe y debéis exigir la realidad de los hechos.
Besos

El derecho a opinar

  Por: Antonio Porras Cabrera Publicado en: https://xornaldegalicia.es/opinion/el-derecho-a-opinar-por-antonio-porras-cabrera https:...