De nuevo con vosotros. Han sido unos días en los que la actividad programada me ha impedido visitar vuestros blogs y dejar entradas en este, salvo la del tema de la conferencia del Aula de mayores. Ahora vuelvo a mi actividad normal.
En estos días han ocurrido muchas cosas en nuestro país dignas de tratar, pero yo hoy quiero compartir con vosotros un hecho que me ha sublevado por su contenido y forma; si bien no soy creyente, ni practico religión alguna, me siento solidario socialmente con todos los conciudadanos que puedan sufrir la influencia o atropellos de las religiones.
Hace unos días una amiga me notificó que el cura de mi pueblo, Cuevas de San Marcos, le había negado la comunión a una señora mayor (en torno a los 70 años), de fe contrastada a lo largo de su vida, por convivir en su casa con un señor. Al parecer lo hizo públicamente, en la misma iglesia y delante de todos los asistentes, si la información que tengo es cierta. Es de imaginar el sentimiento que embargó a la referida señora. Ella que acudía con asiduidad a la iglesia, que era creyente y entendía la espiritualidad desde el amor, se ve sorprendida por el rechazo del cura por, precisamente, practicar ese amor que dice divulgar la religión.
Y es que a uno cada día le cuesta entender y comprender los actos de las jerarquías eclesiásticas, cada vez más lejos de la gran base social de los creyentes. Sorprende que sigan aferrados a la maldad del sexo, cuando su Dios lo puso ahí para practicarlo como forma de expresión de amor y no para reproducirse como hacen los animales cuando afloran las feromonas. Rechazan cualquier forma de expresión amorosa que no sea la que ellos dicen, entiéndase amor entre iguales de género, rechazan el uso del preservativo como profiláctico permitiendo la difusión de enfermedades y muerte, también el amor libre como expresión afectiva entre dos personas adultas, mayores y responsables, rechazan todo aquello que no cuente con su beneplácito anacrónico y obsoleto, de ideas trasnochadas, que solo pretenden el control del feligrés a través de su sumisión a los principios, muchas veces arbitrarios, que van imponiendo.
No quiero ir más lejos en mi análisis crítico a esta iglesia que no condena su propia pederastia hasta que se acorralada, que se permite entrar en el mundo de las finanzas especulando con el dinero de los impositores de su caja “Cajasur” hasta dejarla en bancarrota, sin olvidar las andadas del Monseñor Marcinkus, sí el señor Paul Casimir Marcinkus y el banco Ambrosiano (tecleen en Google su nombre y verán lo que encuentran), que flirteó con las ideologías totalitarias y asesinas del pasado siglo, cuando no las llevó bajo palio, que interviene e intervino a lo largo de la historia en los asuntos de este mundo, cuando proclama que su reino es del otro.
Esta iglesia, amigos, perdió su legitimidad moral en el legado de Cristo, cuando se alió con el poder en tiempos de Constantino. Desde entonces cohabita con él, duerme en el mismo lecho de injusticia y desigualdad amparándolo y protegiéndolo en una simbiosis benefactora para ambas partes. Desde entonces se hizo avaladora ideológica de esa injusticia, a la que soportó al amparo de ejercer la caridad con los más pobres. Me gustaría saber qué haría Cristo con ellos si volviera a su templo y viera lo que hacen.
Pero lo que más sorprende es que un cura, soltero, célibe, que ha renunciado al amor más grande que se puede ejercer, como es el que lleva a la proyección de otras vidas mediante la procreación como mandato bíblico; que debió frustrar y reprimir cualquier intento o afloración de enamoramiento, o deseo carnal hacia otra persona; que soportó, sin condenarlas, las actuaciones pecaminosas de sus colegas, referidas a las diferentes expresiones de la sexualidad (léase provocación y aprovechamiento de adúlteras, relaciones homosexuales, encuentros pasionales clandestinos con resultado de hijas o hijos ilegítimos, pederastia y otras maldades semejantes, en muchos casos delictivas); este tipo de sujeto, digo, no sea capaz de comprender que a determinadas edades la soledad abre puertas al amor sano para transitar en la última etapa de la vida, ese amor busca alianzas benefactoras para las dos partes y crea las últimas ilusiones de la vida llegando al final en compañía. Qué ceguera la suya. Intentar privar a una señora mayor de sus últimas ilusiones, hacerla sufrir y padecer la disonancia cognitiva que reprensada el conflicto entre su creencia alienante y su necesidad vital de amor y compañía, someterla a la humillación pública por enamorarse o convivir con otra persona de distinto sexo… Porque puede que esa convivencia sea asexuada y, entonces… ¿cuál sería el problema? Qué estupidez soberana se le puede ocurrir a un sujeto que antepone la norma de la ceremonia religiosa al propio amor, como si el fin fuese la ceremonia en lugar del amor. Hoy, que están defendiendo la comunicación directa con Dios, que puedes confesar con Él, puesto que es Él el que todo lo sabe, no se percata de que su Dios ya le dio permiso al nacer para relacionarse con los demás, para sentir emociones, para ejercer el amor por mandato divino sin tener que someterse a las arbitrariedades de sujetos terrenales. Si fuera un caso de amor entre mayores, manifestado ante Dios, cómo puede este ser terrenal ir contra la expresión de amor que creó su Dios.
Cada vez me siento más lejos de ellos. Mi corta vida de seminarista y mi tiempo formativo en los Jesuitas me ha llevado a ser muy crítico con la iglesia actual y con su historia, a perder la llamada fe y entender las religiones como algo alienante. Solo me sentí identificado con la idea de la teología de la liberación. Tal vez, como librepensador de concepción laicista, tenga una forma más aséptica de verla, que respete su idiosincrasia, pero cuando surgen estas cosas uno grita y clama al cielo por la repercusión social que tienen. Esto es eso, un grito de repulsa y rechazo social al hecho que denuncio.
Eso sí, permítanme algunos apuntes bibliográficos para contrarrestar su tremenda influencia doctrinal a lo largo de la historia, donde acallaron, etiquetándolos de herejes, todo lo que iba contra ellos, toda crítica argumentada que les ponía en evidencia, como siguen haciendo ahora. Reclamo y defiendo el derecho de todos a informarse y sacar las propias consecuencias libremente, haciendo uso de su capacidad de juicio, de sus raciocinio y discernimiento. Leámoslos, pues, pero como adultos, mayores y con criterio.
Para tener otra visión me permito sugerir al lector:
Biografía no autorizada del Vaticano. De Santiago Camacho. Un interesante repaso a los entresijos del Vaticano y sus finanzas
La puta de Babilonia. De Fernando Vallejo. Un paseo por la historia dando datos precisos de sus desmanes, corrupciones y delitos.
La vida sexual del clero. De Pepe Rodríguez. Acopio de algunos casos contrastados sobre las prácticas y engañifas sexuales del clero.
En estos días han ocurrido muchas cosas en nuestro país dignas de tratar, pero yo hoy quiero compartir con vosotros un hecho que me ha sublevado por su contenido y forma; si bien no soy creyente, ni practico religión alguna, me siento solidario socialmente con todos los conciudadanos que puedan sufrir la influencia o atropellos de las religiones.
Hace unos días una amiga me notificó que el cura de mi pueblo, Cuevas de San Marcos, le había negado la comunión a una señora mayor (en torno a los 70 años), de fe contrastada a lo largo de su vida, por convivir en su casa con un señor. Al parecer lo hizo públicamente, en la misma iglesia y delante de todos los asistentes, si la información que tengo es cierta. Es de imaginar el sentimiento que embargó a la referida señora. Ella que acudía con asiduidad a la iglesia, que era creyente y entendía la espiritualidad desde el amor, se ve sorprendida por el rechazo del cura por, precisamente, practicar ese amor que dice divulgar la religión.
Y es que a uno cada día le cuesta entender y comprender los actos de las jerarquías eclesiásticas, cada vez más lejos de la gran base social de los creyentes. Sorprende que sigan aferrados a la maldad del sexo, cuando su Dios lo puso ahí para practicarlo como forma de expresión de amor y no para reproducirse como hacen los animales cuando afloran las feromonas. Rechazan cualquier forma de expresión amorosa que no sea la que ellos dicen, entiéndase amor entre iguales de género, rechazan el uso del preservativo como profiláctico permitiendo la difusión de enfermedades y muerte, también el amor libre como expresión afectiva entre dos personas adultas, mayores y responsables, rechazan todo aquello que no cuente con su beneplácito anacrónico y obsoleto, de ideas trasnochadas, que solo pretenden el control del feligrés a través de su sumisión a los principios, muchas veces arbitrarios, que van imponiendo.
No quiero ir más lejos en mi análisis crítico a esta iglesia que no condena su propia pederastia hasta que se acorralada, que se permite entrar en el mundo de las finanzas especulando con el dinero de los impositores de su caja “Cajasur” hasta dejarla en bancarrota, sin olvidar las andadas del Monseñor Marcinkus, sí el señor Paul Casimir Marcinkus y el banco Ambrosiano (tecleen en Google su nombre y verán lo que encuentran), que flirteó con las ideologías totalitarias y asesinas del pasado siglo, cuando no las llevó bajo palio, que interviene e intervino a lo largo de la historia en los asuntos de este mundo, cuando proclama que su reino es del otro.
Esta iglesia, amigos, perdió su legitimidad moral en el legado de Cristo, cuando se alió con el poder en tiempos de Constantino. Desde entonces cohabita con él, duerme en el mismo lecho de injusticia y desigualdad amparándolo y protegiéndolo en una simbiosis benefactora para ambas partes. Desde entonces se hizo avaladora ideológica de esa injusticia, a la que soportó al amparo de ejercer la caridad con los más pobres. Me gustaría saber qué haría Cristo con ellos si volviera a su templo y viera lo que hacen.
Pero lo que más sorprende es que un cura, soltero, célibe, que ha renunciado al amor más grande que se puede ejercer, como es el que lleva a la proyección de otras vidas mediante la procreación como mandato bíblico; que debió frustrar y reprimir cualquier intento o afloración de enamoramiento, o deseo carnal hacia otra persona; que soportó, sin condenarlas, las actuaciones pecaminosas de sus colegas, referidas a las diferentes expresiones de la sexualidad (léase provocación y aprovechamiento de adúlteras, relaciones homosexuales, encuentros pasionales clandestinos con resultado de hijas o hijos ilegítimos, pederastia y otras maldades semejantes, en muchos casos delictivas); este tipo de sujeto, digo, no sea capaz de comprender que a determinadas edades la soledad abre puertas al amor sano para transitar en la última etapa de la vida, ese amor busca alianzas benefactoras para las dos partes y crea las últimas ilusiones de la vida llegando al final en compañía. Qué ceguera la suya. Intentar privar a una señora mayor de sus últimas ilusiones, hacerla sufrir y padecer la disonancia cognitiva que reprensada el conflicto entre su creencia alienante y su necesidad vital de amor y compañía, someterla a la humillación pública por enamorarse o convivir con otra persona de distinto sexo… Porque puede que esa convivencia sea asexuada y, entonces… ¿cuál sería el problema? Qué estupidez soberana se le puede ocurrir a un sujeto que antepone la norma de la ceremonia religiosa al propio amor, como si el fin fuese la ceremonia en lugar del amor. Hoy, que están defendiendo la comunicación directa con Dios, que puedes confesar con Él, puesto que es Él el que todo lo sabe, no se percata de que su Dios ya le dio permiso al nacer para relacionarse con los demás, para sentir emociones, para ejercer el amor por mandato divino sin tener que someterse a las arbitrariedades de sujetos terrenales. Si fuera un caso de amor entre mayores, manifestado ante Dios, cómo puede este ser terrenal ir contra la expresión de amor que creó su Dios.
Cada vez me siento más lejos de ellos. Mi corta vida de seminarista y mi tiempo formativo en los Jesuitas me ha llevado a ser muy crítico con la iglesia actual y con su historia, a perder la llamada fe y entender las religiones como algo alienante. Solo me sentí identificado con la idea de la teología de la liberación. Tal vez, como librepensador de concepción laicista, tenga una forma más aséptica de verla, que respete su idiosincrasia, pero cuando surgen estas cosas uno grita y clama al cielo por la repercusión social que tienen. Esto es eso, un grito de repulsa y rechazo social al hecho que denuncio.
Eso sí, permítanme algunos apuntes bibliográficos para contrarrestar su tremenda influencia doctrinal a lo largo de la historia, donde acallaron, etiquetándolos de herejes, todo lo que iba contra ellos, toda crítica argumentada que les ponía en evidencia, como siguen haciendo ahora. Reclamo y defiendo el derecho de todos a informarse y sacar las propias consecuencias libremente, haciendo uso de su capacidad de juicio, de sus raciocinio y discernimiento. Leámoslos, pues, pero como adultos, mayores y con criterio.
Para tener otra visión me permito sugerir al lector:
Biografía no autorizada del Vaticano. De Santiago Camacho. Un interesante repaso a los entresijos del Vaticano y sus finanzas
La puta de Babilonia. De Fernando Vallejo. Un paseo por la historia dando datos precisos de sus desmanes, corrupciones y delitos.
La vida sexual del clero. De Pepe Rodríguez. Acopio de algunos casos contrastados sobre las prácticas y engañifas sexuales del clero.
43 comentarios:
No se parece a la imágen de mi hermana trinitaria, pero sí mucho más a la realidad de una secta que en muchos casos, como el de tu cura, se hace verdaderamente odiosa.
Tal vez eso explique que en los momentos difíciles sean los sacerdotes y las monjas y la iglesia en general víctima de excesos que no voy a justificar pero que si entiendo.
Pero Antonio, ya mucho antes de Constantino se hizo el mal. Fue el converso Saulo el auténtico falsificador del mensaje de Jesús de Nazareth. El es el mayor responsable de todo lo malo que ha ido edificándose después hasta llegar a este cura indigno.
un abrazo
Txema, acepto tu observación. Lo que pasa es que se consuma la alianza con el poder en tiempos de Constantino, pero la semilla la puso el otro sujeto, ese tal Saulo al que tu te refieres ¿de Tarso era?
Un abrazo
Intentaré ser breve, porque como bien dices "ahí me has dado".
1- Compartimos gusto por imágenes, pues yo puse la misma en un post allá por el veintitantos de Octubre pasado metiéndome con el clero.
2- Estamos de acuerdo con respecto a la Teoría de la Liberación.
3 - Txema tiene razón con respecto a Pablo de Tarso.
4 - Tiendo más a creer que el Jesucristo tal y como nos lo venden no existió sino que su figura representa a un conjunto de personajes de aquella época convulsa. Conociendo la naturaleza humana y su funcionamiento colectivo tiendo a verlo como más certero. Un abrazo ateo.
Si me refiero a ese farsante llamado Saulo de Tarso, verdadero cáncer del cristianismo.
estoy de acuerdo con lo que comentas en tu árticulo Antonio.
Un abrazo y gracias por volver
Y bueno cada maestro con su librito.
si es posible escribele a esa dama y dile que no se preocupe en mi familia hubo muchas damas excomulgadas por divorciarse y ha sido muy felices y de vida ejemplar para la familia.
Y tu y y cometeremos virtualmente un gran pecado no??? pues si aca va a traves del oceano un gran abrazo!!!!
Emejota, gracias por tu comentario. Yo sí pienso que Jesucristo existió, pero no ese que nos cuentan, sino un hombre inteligente que criticó lo que pasaba e intentó exponer sus ideas a su pueblo. Lo otro, dentro de la creación de la tendencia ideológica o religiosa que surgiera, se fue manipulando por los advenedizos y desvirtuando para arrimar el ascua a su sardina. De todas formas no creo que hablara ex cátedra ni en esas cosas del mesías y tal y tal.
Es un debate interesante de cómo el poder fraguó su moral y su ética basándose en las religiones para refortalecerse. Un tema que da para mucho debate.
Un abrazo a teo y otro para ti. Lo de teo es broma pues se ha de reír uno de todo antes que sucumbir, me he permitido esa licencia.
Gracias por tu visita y comentario, Marian.
Un abrazo
Ay, Abu, lo que le cuesta a algunas personas mayores romper los esquemas del pasado tan incrustados en sus mentes. Es posible que descubra la verdad desde el amor y deseche el integrismo religioso de los talibanes católicos.
Un abrazo pecaminoso también para ti. A los abuelos nos está permitido todo, nos lo ganamos a lo largo de la vida, diga el cura lo que diga.
Yo solo estoy casado por lo civil, por lo tanto estoy fuera de "Sus diminios" el día que las personas que esten en mi situación, o divorciados, gay, lesbianas... recibamos una notificación invitandonos a que abandonemos "Su iglesia" se pueden llevar una sorpresa al descubrir que les queden pocos "Fieles".(De todas formas a mi personalmente me importa lo más mínimo lo que piensen mientra a mi no me impongan nada). Un saludo.
..."La mayor virtud de todo ser humano es encontrarse a sí mismo sin importar los obstáculos que imponga otro ser humano con igual o mayor cantidad de pecados reliogiosamente hablando,que tú".
La igualdad siempre debe ser esa base de respeto mutuo, respetando el libre albedrio que tenemos en creer o no creer, tengo amistades que no creen en nada, son completamente agnosticos, ateos, en fin creencias míl, les respeto y jamás les cuestionaria, y de igual ellos a mí, esto está en el respeto y la igualdad del mismo.
Mamé, a mí solo me rebeló el hecho de que este sujeto no comprendiera el mal que generaba a esa señora con su interpretación y su hipocresía. Como no creyente ni entraría en el asunto si no fuera por eso. Como dicen en mi pueblo que cada perro se lama su...
Un saludo
Peter, como librepensador y laicista, entiendo que en el respeto, como tú bien dices, está la verdadera virtud de la convivencia, pero la trascendencia social de determinadas actuaciones sobrepasan esa actitud de respeto para entrar en lo denunciable desde cualquier perspectiva, puesto que rompe la más elemental norma de ese respeto a la intimidad y la libertad de las personas.
Un abrazo
Desde tu pueblo que es el mío me han llegado algunas referencias a este tema... y me parece vergonzoso, indigno y realmente repulsivo, por el acto de humillación que puede llegar a representar semejante momento.
Pero a esta señora, adelante, que la vergüenza tiene que llevarla este individuo, y en ningún caso ella. El ejercicio de la libertad de querer, amar, compartir con quien quiera, no puede deshonrar a nadie. Intentar impedirlo, es deshonroso del todo.
Y que luego sea tan difícil que concedan la apostasía...
Un abrazo
Eloy
Gracias, Eloy, por tu aportación sobre el tema.
Me preocupa el asunto sabiendo como es nuestro pueblo.
Un abrazo
Antonio, hace como un año que salió en televisión un caso parecido.No es la primera vez que actúan de esa manera bochornosa y cruel.
«Por sus frutos los conoceréis»
Yo, que me eduqué entre monjas y curas, apostaté de la religión católica para poder casarme por lo civil. Me costó tres meses de trámites, tal era la tenaz oposición que ofrecían para aceptar que un creyente se les fuera.El artículo lo tengo en mi blog:
http://ellugardejuan.blogspot.com/2010/02/el-precio-de-las-libertades.html
Es bueno que la gente sepa lo que sucede en los templos y por eso te agaredzco tu entrada.Si tuviera la oportunidad, yo le diría a esa señora que no se preocupe, que se puede vivir perfectamente feliz sin ellos, que se puede amar plenamente sin ser socios de ese club maldito de pederastas y fornicadores. Tenía (hace cuarenta años que no sé de ella)una prima en Algar, mi pueblo. Era la más guapa de todas las muchachas en veinte kilometros de radio.Trabajaba como asistenta en casa del cura.Estos, que predican la pobreza tienen buenas casa y palacios con criados. Con dieciocho años mi prima se quedó embarazada del cura y se fue del pueblo.
Me siento indignado e impotente al no poder impedir con todos los medios que esa gentuza, esa manada de hijos de perra con sotana,siga mandando en España.
Un abrazo.
Verdaderamente han desvirtuado su religión y han hecho de su obsesión por el sexo el mayor pecado. Pero mientras que ellos no tienen problemas, puesto que si cometen pecado, se confiesan y se arrepienten y hasta el nuevo pecado. En el caso de esta pobre mujer, además de haber tenido que soportar el oprobio en el templo, sólo será perdonada si renuncia a lo más importante que tiene en su vida.
¡Vergonzoso! Es gente sin corazón, incapaz de entender las cosas más bellas de la vida, seguramente porque su propia religión se las prohíbe.
Espero que la mujer supere esta situación y mande a tal cura a hacer puñetas y no renuncie a su amor.
Salud y República
Querido Antonio, ya te echabamos de menos así que una alegría tu vuelta. Me subleva lo que has contado. Además de hipocrita por parte del cura, ha tenido intención de dañar hacer público su rechazo. Pobre mujer y espero que el pueblo entero se solidarice con ella y aisle a ese párroco.
Un beso
A mi madre, que era muy religiosa, casada por la Iglesia y "toda la hostia" le pasó algo parecido estando embarazada precisamente de mí.
Resulta que fue a comulgar porque le quedaban pocos días para el parto y quería estar en gracia de dios.
Pues bien, le negaron la comunión por ir con una manga a la altura del codo lo que era "indecoroso" para recibir la comunión según el cura (D. Eugenio). Pero, claro, de esto hace 57 años.
Amigo Juan, todos tenemos historias desagradables con el clero, seguro, pues ellos siempre se pensaron estar por encima del bien y del mal, ya que ellos son el bien por definición.
Su megalomanía lleva a identificarse como ministros de Dios. Qué barbaridad! Para qué narices quiere Dios intermediarios cuando puede acceder a sus hijos de forma directa? Lo que han encontrado es el viejo rol social del sacerdote engañifa, que acojonaba a la gente con el más allá y toda la magia y misterio de la ignorancia. Con ello se mantienen nutridos y reputados.
Un abrazo
Rafa, su obsesión por el sexo debió incrementarse en el momento que se lo prohibieron. Los subterfugio para satisfacerlo, las desviaciones compensatorias, la frustración y represión, solo puede acarrear conflicto interno y proyección en los demás. Así nos educaron en esta materia, para jodernos a todos sin dejarnos joder a gusto.
Un saludo
Gracias, Carmen. Ciertamente estos sujetos no tienen corazón. Están presos de ideas, con la mente cerrada y lo dogmático encorsetándolo todo. El dogma mató a la idea libre y nos quieren imponer su estilo de ver y vivir la vida. Que formen pareja, que convivan con su mujer o su marido, que críen sus hijos y no se escondan detrás de la sotana para decir chorradas desde la barrera.
Un beso
Txema, lo de tu madre clama al cielo, sobre todo por lo del codo. Me recuerda mi viaje a Túnez, cuando en Kairouan, al entrar en el patio de la mezquita me hicieron poner una chilaba porque el pantalón corto estaba por encima de las rodillas. No hace tanto que estábamos aquí, como ellos. Esto son las reminiscencias y el intento de volver a un integrismo estúpido, en una era donde la gente está por encima de las ideas estúpidas y chorradas, Aún hay muchos D. Eugenios sueltos.
Hola Antonio,
veo que hemos estado ausentes al mismo tiempo por otras obligaciones.
No comento el tema de curas e iglesias porque como a ti, me indigna, y prefiero no prestarles ninguna antención.
Saludos.
Gracias por tu visita, Lola. Volvemos a estar en escena.
Un beso y me parece bien evitar que las bilis se derramen.
Antonio, me alegra que estés de vuelta ;)
Dicho esto yo hace mucho tiempo que desistí de entenderlos.
Estudié en un internado de monjas crueles, en el pueblo de mi madre padecieron durante años a un talibán que se dedicaba a hacer gestos como el que tu cuentas, negar la comunión a según quien, el matrimonio a quien le parecía e incluso el bautismo a una inocente. Este último caso fue peor, porque los padres no están casados por la iglesia pero los abuelos son católicos militantes y querían que se bautizase a la nena. El cura no sólo no lo aceptó sino que removió cuánto pudo hasta que les dijeron que nadie la bautizaría en esa diócesis y así ad infinitum.
Yo se que hay entre ellos personas buenas, creyentes convencidos, discípulos fieles de aquel que dicen que andaba descalzo por los caminos hablándoles de amor a los parias de la tierra pero son los menos y no tienen ningún poder.
Los que si lo tienen son los que son y son lo que son y hace mucho tiempo que deberían haberlo dejado de tener.
Un abrazo, Antonio
Me encantó que volvieras, Antonio.
Me parece hipócrita y una verguenza el actuar de ese cura pero que lo hace en base a las normas que dicta la iglesia.
Pienso que cada uno es libre de actuar en su vida como quiera, porque cada cual es responsable de elegirla, y a nadie le tiene por qué importar la vida privada de cada cual.
Pero lo que ha pasado en tu pueblo, es el reflejo de lo que hay en España.
Con tu permiso quiero comentarle a TXEMA.
No me extraña que le hicieran eso a tu madre, yo tengo cuarenta y tantos años, pero recuerdo cuando era una niña que cuando iba al pueblo, no nos dejaban ir en manga corta a comulgar, estaba prohibido.
Un beso, Antonio.
Hola Almalaire. Deduzco por tu nombre y por tu comentario que eres un espíritu libre. Eso me gusta. Además estoy de acuerdo en lo que dices. Ciertamente hay mucha gente de buena voluntad en las religiones, pero el mando suele ser distinto.
También te felicito por tu blog al que visité.
Un abrazo
María, es curioso, pero los curas hacen lo que entienden ellos según su propio criterio. Hace 23 años, un cura bautizó a mi sobrino, siendo hijo de padre separado y emparejado ilegalmente con la madre. Ese criterio está totalmente contrapuesto a este.
En la iglesia conviven teorías y posiciones tan dispares que a uno le escandaliza. Tal vez por eso, entre otras muchas cosas, se haya mantenido en el tiempo, arrimándose al sol que más calienta.
Un beso
Yo creo que la jerarquía está haciéndose el harakiri. No se puede uno comportar de manera tan distante a la realidad en que se vive, como hace la Iglesia. Parecen unos descerebrados que no entienden lo que les pasa alrededor. La sociedad los arrolla y ellos permanecen en sus posiciones anquilosadas, obsoletas y tridentinas. Peor para ellos.
Antonio, suscribo todo lo que dices. La iglesia tiene una doble moral que no soporto.
Estoy segura que a los ojos de Dios, el amor de esa señora, tiene mas valor que el de ese cura con una doctrina obsoleta.
Has vuelto con ganas...
Alguno de los libros que comentas lo he leído. Yo estudié con los escolapios y en cierta medida dejaron huella. Una educación religiosa siempre la deja, ni que sea para acabar rompiendo con ella. Digamos que por la Iglesia siento una enorme atracción y una enorme repulsa. Atracción por mi biografía escolar. Repulsa por tres cientas veinte cosas que se me ocurren ahora, así de golpe, y sin necesidad de pensar demasiado. Pero que justo ahora estoy consiguiendo que me afecte menos, hasta ahora no lo había conseguido plenamente, señal de que algo quedaba de lo que me habían inculcado. Desde hace un par o tres de años la ruptura ha sido mayor, no a nivel de creencias sino a nivel meramente religioso. Cada día me importan menos.
Lo que sí me importa es la gente. Y me indigna tanto el abuso moral de la Iglesia, inculcando ideas de otra época, como el que pueda juzgarse y causar daño a alguien que ha decidido compatibilizar su permanencia en la Iglesia con su propia vida afectiva. A esa gente, como la que cuentas en tu entrada, la Iglesia puede todavía hacerles mucho daño.
El pobre cura de tu pueblo, con el cerebro bien lavado, estaba siguiendo sus deberes sacerdotales, según según las enseñanzas de sus superiores. Y por miedo de ellos, no podía usar su sentido común (suponiendo que lo tenia) ni un poco de compasión. Pero no sería mal que los demás feligreses dejaran de ir a la iglesia en forma de protesta.
Un periodista americano, H. L. Menken, dijo que la religión organizada ha causado más sufrimiento en el mundo que todas las guerras juntas. Estoy de acuerdo. La primera prioridad de la iglesia católica no es el bienestar de los feligreses, sino mantener el poder de la iglesia, y evitar escándalo a toda costa. Los que deben estar en la cárcel, más que los curas pedófilos, son los obispos que reparten el crimen cambiándolos de una parroquia a otra.
Es una pena que la iglesia, que supuestamente existe para enseñarnos el camino a la espiritualidad, sea un impedimento a ese camino. Y también es una pena que muchos, cuando llegan al punto de que rechacen la iglesia, a la vez pierden su fe en Dios.
Yo, aunque no tengo mucha fe en la iglesia, tengo fe absoluto en Dios. Aunque muchos crean lo contrario, Dios no es la iglesia. “Lo que Dios manda” es en realidad lo que la iglesia manda, y generalmente con el propósito de beneficiar a la iglesia. . Si fuera lo que Dios manda, todas las iglesias, sinagogas y templos estarían de acuerdo, porque solo hay un Dios.
Me gusta algo que leí el otro día—Hay muchos dioses porque Dios esta en cada uno de nosotros. Eso es algo que la iglesia no quiere que sepamos. Creo que somos parte de un cuerpo, el cuerpo de Dios, que nuestras almas son mas viejos que el universo, que la mayoría de nosotros hemos vivido muchas vidas, y que seguimos reencarnando hasta que lleguemos a cierto nivel de perfección.
Ciertamente, Arabos, la iglesia demuestra con estas cosas que está fuera de lugar. El asunto es que cada día la gente tiene más criterio, más conocimiento y más amplitud de razonamiento, por lo que ya no cuelan tanto los planteamientos amparados en la ignorancia del feligrés. Efectivamente, la evolución social les arrolla, aunque ellos quieran ponerle freno.
Querida Maripaz, por eso digo yo que Dios ya bendijo esa unión provocándola. Nada ocurre por que sí, sino para algo. Lo lamentable es que el cura no entienda que su Dios, de existir, ya dio el visto bueno, o puede que no exista ese dios tan injusto que él defiende.
Ramón, estoy totalmente de acuerdo con lo que planteas. Yo también siento aún ese influjo educacional que he tenido que ir superando a base de razonamientos y discernimientos ante situaciones detectadas de pura contradicción entre lo que dicen y lo que hacen. Por eso perdí la fe y por eso me alejé de ellos. No me identifiqué como ateo, pues no niego nada, pero tampoco lo afirmo, solo sé que no sé nada y quiero saber, pero no que me engañen. Si existe Dios, le doy las gracias por haberme dado el criterio y la capacidad de razonar, incluso para dudar de su existencia.
Hola Richard, bienvenido a esta casa que es la tuya. Es un placer poder contar con tu sabia opinión de maestro de la vida al amparo de tus experiencias y bagaje.
Tu comentario me parece cargado de razón y de respeto. En el comentario que le hago a María, le refiero que un cura bautizó a un sobrino mío de padres separados y conviviendo sin pasar por el altar. Quiero decir con ello, que la decisión fue tomada por él, al igual que ha hecho este, pero en sentido contrario.
Comparto contigo la idea de que si Dios existe no lo representa ninguna religión, sino que está en cada sujeto. Esa idea, que es compatible con la visión de la energía cósmica inteligente, tiene más consistencia que cualquier religión. El budismo creo que está más cerca de esta posición que cualquier religión formal.
En un artículo anterior publicado en este mismo blog hace más de un año y que me publicó la prensa digital, llamado “Dios es laico”, defiendo en cierto sentido lo que tú refieres, con algunos matices. Me defino laico por entender que los gobiernos de la ciudadanía no deben estar sujetos a religiones y respeto a quien crea en su idea de dios, pero siempre que no quiera imponerme a mí su fe y su forma de vida, o influir en las leyes civiles para que se guíen por sus creencias.
La espiritualidad, al entender que va con cada sujeto, es personal e íntima y no debe implantarse en nadie, salvo por convicción y no por imposición. Es una decisión que tiene más valor en cuanto se tome desde la libertad individual, pues es asumida por convencimiento.
Para mí las religiones han tenido la intención de encajonar la espiritualidad del ser humano, sometiendo a Dios a unas normas terrenales, cuando en realidad su infinitud debería hacernos ver nuestro poco conocimiento para entenderlo y normalizarlo o dogmatizarlo. En cierto sentido han confundido la necesidad de fraguar una cultura y normas sociales de convivencia con la religión, cuando la espiritualidad, que para mí es esa tendencia y preocupación sistemática por la búsqueda de la verdad de la vida y su entendimiento, va mucho más allá. Hay quien dice que la ciencia nos llevará a estar más cerca de Dios, pues nos hará comprender las leyes que fraguan la existencia del mundo.
Puede que tengas razón y seamos energía o espíritus en evolución y que existan niveles de esa energía a la que nos vamos sumando cuando se muere, incluso, se vuelva para seguir perfeccionándose. Esos pensamientos no dejan de ser muy atrayentes, aunque en el fondo no se tenga certeza de que sean así, al menos en mi caso.
Un abrazo
Antonio ha sido un placer pasar por tu rincón y leer tu comentario. Personalmente me irrita, tanto el comportamiento institucional como la miseria de muchos seguidores, manipulados y críticos con otras religiones, pero ese es su problema. Peor entiendo a la mujer apartada y discriminada, sin otro papel que limpiar, en una institución claramente antidemocratica.
Así estamos amigo.
Un fuerte abrazo
P.D:Si apetece puedes pasar por un viejo texto :
http://el-pinto.blogspot.com/2009/10/el-mitraismo-precursor-del.html
Gracias por tu visita, El Pinto (¿Benito?). Pasé por la entrada que me indicas y me satisfizo lo que leí. Sobre ese tema he escrito también bastante, pues me interesa mucho desde el punto de vista sociológico. Puedes ver mi entrada ¿Dios existe? En: http://antoniopc.blogspot.com/2009/04/dios-existe.html
Un abrazo y andaré por tu casa, de cuando en cuando, para conocer tus escritos.
Si a Cristo se le ocurriera volver, mas le valdría hacerlo rodeado de pompa y majestad, porque si viene en alpargatas y túnica de esparto seguro que lo vuelven a crucificar. ¿Te lo imaginas predicando aquello de que "es mas difícil que un rico entre en el reino de los cielos a que un camello entre por el ojo de una aguja".
Siempre me pregunté cómo se les ocurría poner en nuestras manos semejantes escritos. Supongo que porque pensaban que a pocos se les ocurriría leerlo.
Amigo Camino, podría ser que tuviera la suerte de ser elegido como ejemplo para ejercer la caridad y le dieran de comer, unos zapatos y ropa, etc… pero con la condición de que se callara y no les desmontara el negocio.
Con respecto a lo del rico y el ojo de la aguja, y tal y tal… el otro día leí que, al parecer, no era eso lo que quería decir el evangelio, que se desvirtuó en las traducciones del griego o algo así. No sé, yo sigo pensando que el evangelio se lo adecuaron ellos a su conveniencia y eliminaron lo que no les interesaba. Aunque eso pudiera ser efectivo para acojonar a los ricos y que le dieran pasta para su mantenimiento.
Hola Antonio, el sabado día 5 bautizanan a mi nieta Thelma, estamos mi marido y yo en Gijón y mis tres hijos y mi nuera volaran el viernes desde Barcelona pera reunirnos todos. Mi hija no esta casada pensaban que el cura no querria bautizar a la niña, pero no han tenido ningún problema.
La historia que cuentas es increible e injusta, no tienen ningún derecho a negar la comunion, por estos casos y tantos mas de maldad, se encuentran tan solos.
Lo malo es que pagan justos por pecadores, no podemos perder la fé en Cristo por estos desgraciados que a quien sirven es al Demonio.
Siempr que leo el Evangelio de San Juan, descubro de nuevo a Jesus, soy cristiana.
Un abrazo.
Querida Luna Llena, yo soy agnóstico convencido, tras pasar por el seminario y estudiar con los jesuitas. No niego que Dios exista, pero me gustaría saber como se entiende, cuales son sus formas y valores, cual su sentido y objeto. El dios que predican las religiones está manipulado, para mí. A través de la historia lo han ido fraguando para sostener y justificar el sistema. Al menos yo lo veo así.
Es cierto que en el ser humano existe una tendencia a buscar la verdad de la vida. ¿A eso le llamamos espiritualidad? Esa vida que entendemos como milagro porque no la comprendemos ni sabemos como se fraguó. Entonces pensamos en un Ser Superior como hacedor. Con el tiempo se van descubriendo muchas cosas y se aclaran más, hasta comprender lo incomprensible. ¿Llegaremos a Dios por el camino de la ciencia? Puede que sí, que al final comprendamos la esencia del mundo, aunque sea en una mínima parte, a través de la investigación y de la ciencia. De hecho hoy estamos a niveles infinitamente más adelantados que hace 2000 años. Por eso no comprendo como puede servir una filosofía o religión creada para aquellos tiempos.
Este hecho demuestra lo obsoletos que están esos planteamientos regresivos sostenidos aún por sectores importantes de las religiones.
Un abrazo y gracias por tu comentario.
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