viernes, 12 de marzo de 2021

SOBRE LA LIBERTAD



Un amigo, plantea en su muro de Facebook: "Socialismo es libertad, decía Felipe González. Socialismo o libertad, dice Ayuso. ¿De qué libertad hablamos?".

Esa especie de dicotomía que ha usado la señora Ayuso entre socialismo y libertad (que tiene bemoles plantearlo así), despertó en mi memoria aquellos adoctrinamientos del régimen franquista a través de su Formación del Espíritu Nacional. Tal vez muchos de los lectores desconozcan que en aquel tiempo se adoctrinaba a los chavales mediante una asignatura específica, que pretendía sembrar la semilla del fascismo y el Nacionalcatolicismo en la infancia mediante la difusión de los principios del llamado Movimiento Nacional, sostén ideológico del régimen.

Recuerdo en una ocasión, cuando el profesor hablaba de la libertad del ser humano, su defensa a ultranza de la misma, diciendo que el hombre siempre era libre y lo sería porque no había nadie que le pudiera arrebatar su libertad de decisión. He de decir que yo sentí como chocaba en mi inocencia infantil aquella afirmación. Pues creía que la libertad, tal como decía mi padre, consistía en la personal toma de decisiones sin que nadie interfiriera en ello para orientar tu decisión en un sentido ajeno a tus interes o convicciones. O sea, mi libertad consiste, y esto lo digo ahora cuando ya andamos en los 70, en una toma de decisiones responsable mediante un justo análisis de la situación para, en conciencia, resolver esa situación con el mayor beneficio para uno y el entorno, respetando a los demás, sin ser sometido a presiones externas, pues ya, de por sí, mis propios principios ejercen el control y la justicia en la decisión…

Pero, curiosamente, aquel excelso adoctrinador del régimen, planteaba una situación extrema, llevada al límite, tal vez, incluso, al límite del paredón de fusilamiento, porque, para justificar su discurso, decía: “El hombre es libre siempre, pues si yo te pongo una pistola en la cabeza y te digo que hagas algo o te mato, tú puedes decidir si lo haces o morir”. Extraña forma de entender la libertad… o extraña forma de justificar al liberticida. Menos mal que el pensamiento sí será siempre libre, mantenido en la intimidad, y eso hará cuestionarse todas las sandeces que pretendan inocularnos, pero, en la infancia, deja secuelas adoctrinadoras que, de mayor, has de revertir no siempre con el éxito deseado, cuando el troquelado se resiste.

 

2 comentarios:

Myriam dijo...

Muy de acuerdo: La libertad, para mi también consiste en "una toma de decisiones responsable mediante un justo análisis de la situación". Lo otro, lo del todo vale, es libertinaje y egoísmo.

Besos x 2
Cuídense mucho, los extraño.

Antonio dijo...

Garcias amiga. Un abrazo con mis deseos de suerte y salud ante este trance.

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