Pido disculpas por no haber subido nada durante estos últimos días a mi blog. La cuestión es que anduve de viaje por esa preciosa isla que es Mallorca. Si bien ya la conocía, me he permitido visitarla en compañía de unos amigos durante esta última semana y no ha dejado de sorprenderme. No pretendo escribir una crónica de mi viaje, pero sí compartir con vosotros algunos momentos al amparo de mi relato.
Ubicados en la playa de Magaluf, hicimos allí nuestro centro operativo. Visitamos Inca, Alcudia puerto y ciudad, Pollença, Soller, Valldemosa (el palacio de Sancho, la Cartuja, lugar de la estancia de Chopin), Esporles (La Granja), Deiá y Palma, el tiempo no dio para más. El cielo se encargó de recordarnos que estábamos en invierno y que en esta estación el riego celestial es una cuestión bastante habitual. Eso sí, acompañado con cierta dosis de frío, por lo que decidimos alquilar un vehículo para tener más libertad operativa.
No me atrevería a resaltar en exceso un lugar sobre otros, pero sí los que más me impactaron. Palma, como siempre, se mostró esplendorosa, con su catedral, donde furtivamente anduve fotografiando y ahora no sé si la SGAE me pedirá algún impuesto, si bien un señor que deambulaba por allí nos dijo que las hiciéramos sin flash. Aquí se me presentó un dilema. A mi amigo le hicieron quitar la gorra, pero no a las señoras. Al parecer se considera una falta de recato, en un lugar sagrado y de oración, que un señor lleve gorra, pero no una señora.
El hecho es que pagamos una entrada y la catedral dejó de ser catedral para convertirse en museo, supongo… De lugar sagrado y de oración pasó a ser lugar de negocio y yo creo que esto cambia las cosas. Si Jesús entrara en ella los echaría a palos por “mercadear en la casa de su padre”. Esta es una de las incongruencias de la religión, que hace sus obras para el culto con los donativos y luego los emplea como negocio. Pero en fin, ese es otro tema, aunque a uno le rehierva la sangre. Lo cierto es la cantidad de obras de arte y la impresionante estructura que la sustenta… Maravillosa!!!
A reseñar también su puerto, el palacio de la Almudena, el edificio del ayuntamiento con su olivo centenario en la plaza, las Cortes, la plaza Mayor, las basílicas de Santa Eulalia y San Francisco, la Iglesia de San Miguel y un sinfín de callejas estrechas y bien cuidadas que te remontaban a tiempos pretéritos.
Nos sorprendió gratamente Alcudia por su monumentalidad y calles perfectamente cuidadas y conservadas. Inca y Pollença, que también se mostraban en esta línea. En Valldemosa es obligada la visita a la Cartuja y el palacio del rey Sancho. En la cartuja se albergó Frederic Chopin durante un par de meses y dejó allí su impronta. Sus calles espectaculares.
Qué decir de Deiá, salvo que es impresionante su ubicación, sus calles, la iglesia (con dos cañones en la puerta…) el cementerio anejo y un sinfín de casas ancladas, amorosamente, a la falda de la verde montaña. Verde que te quiero verde, verde amor, verde esperanza…
El viaje a Soller y su puerto fue otro punto interesante. La subida en un vetusto tranvía desde el puerto al pueblo… La visita a su monumental iglesia, sus calles colmadas de edificaciones suntuosas y bien conservadas y la vuelta en el famoso tren de Soller con casi 100 años de antigüedad. En el camino, atravesamos por diversos túneles la sierra de Tramontana, para encontrarnos con los campos de almendros floridos, algarrobos y toda la flora y verdor propios del tiempo y del lugar.
Bueno, no quiero ser pesado y como una imagen vale tanto, os dejo un slide con varias fotografías para los que quieran darse un paseo virtual por la isla. En todo caso, os cuelgo, a modo de presentación, una foto del amanecer entre las nubes, a caballo del avión que nos devolvía a Málaga.
Ubicados en la playa de Magaluf, hicimos allí nuestro centro operativo. Visitamos Inca, Alcudia puerto y ciudad, Pollença, Soller, Valldemosa (el palacio de Sancho, la Cartuja, lugar de la estancia de Chopin), Esporles (La Granja), Deiá y Palma, el tiempo no dio para más. El cielo se encargó de recordarnos que estábamos en invierno y que en esta estación el riego celestial es una cuestión bastante habitual. Eso sí, acompañado con cierta dosis de frío, por lo que decidimos alquilar un vehículo para tener más libertad operativa.
No me atrevería a resaltar en exceso un lugar sobre otros, pero sí los que más me impactaron. Palma, como siempre, se mostró esplendorosa, con su catedral, donde furtivamente anduve fotografiando y ahora no sé si la SGAE me pedirá algún impuesto, si bien un señor que deambulaba por allí nos dijo que las hiciéramos sin flash. Aquí se me presentó un dilema. A mi amigo le hicieron quitar la gorra, pero no a las señoras. Al parecer se considera una falta de recato, en un lugar sagrado y de oración, que un señor lleve gorra, pero no una señora.
El hecho es que pagamos una entrada y la catedral dejó de ser catedral para convertirse en museo, supongo… De lugar sagrado y de oración pasó a ser lugar de negocio y yo creo que esto cambia las cosas. Si Jesús entrara en ella los echaría a palos por “mercadear en la casa de su padre”. Esta es una de las incongruencias de la religión, que hace sus obras para el culto con los donativos y luego los emplea como negocio. Pero en fin, ese es otro tema, aunque a uno le rehierva la sangre. Lo cierto es la cantidad de obras de arte y la impresionante estructura que la sustenta… Maravillosa!!!
A reseñar también su puerto, el palacio de la Almudena, el edificio del ayuntamiento con su olivo centenario en la plaza, las Cortes, la plaza Mayor, las basílicas de Santa Eulalia y San Francisco, la Iglesia de San Miguel y un sinfín de callejas estrechas y bien cuidadas que te remontaban a tiempos pretéritos.
Nos sorprendió gratamente Alcudia por su monumentalidad y calles perfectamente cuidadas y conservadas. Inca y Pollença, que también se mostraban en esta línea. En Valldemosa es obligada la visita a la Cartuja y el palacio del rey Sancho. En la cartuja se albergó Frederic Chopin durante un par de meses y dejó allí su impronta. Sus calles espectaculares.
Qué decir de Deiá, salvo que es impresionante su ubicación, sus calles, la iglesia (con dos cañones en la puerta…) el cementerio anejo y un sinfín de casas ancladas, amorosamente, a la falda de la verde montaña. Verde que te quiero verde, verde amor, verde esperanza…
El viaje a Soller y su puerto fue otro punto interesante. La subida en un vetusto tranvía desde el puerto al pueblo… La visita a su monumental iglesia, sus calles colmadas de edificaciones suntuosas y bien conservadas y la vuelta en el famoso tren de Soller con casi 100 años de antigüedad. En el camino, atravesamos por diversos túneles la sierra de Tramontana, para encontrarnos con los campos de almendros floridos, algarrobos y toda la flora y verdor propios del tiempo y del lugar.
Bueno, no quiero ser pesado y como una imagen vale tanto, os dejo un slide con varias fotografías para los que quieran darse un paseo virtual por la isla. En todo caso, os cuelgo, a modo de presentación, una foto del amanecer entre las nubes, a caballo del avión que nos devolvía a Málaga.
Previo al slide, os dejo una imagen con los productos típicos de las islas.
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26 comentarios:
...Gracias porque como siempre nos nutres con cada nueva entrada, pero tambien tenemos que tomar tiempo para uno mismo jeje, asi que a continuar plasmando esencias!! Excelentes Fotos!! Peter
Preciosas fotos. Hace años 20 años me quedé "colgada" de Deía. Saludos.
Bonita Mallorca y no he visto cuevas mas bellas que las del Drac.
Buen viaje Antonio hay que disfrutar todo lo que podamos!!
Un abrazo y me alegro de tu vuelta
Hermoso viaje has realizado!!!!
Cariños
Un viaje sensacional a esta isla que me tiene enamorada desde pequeña, todo es bonito allí y la comida típica mallorquina es de muerte, has probado el Tumbet? La coca mallorquina?, son buenísimos, las fotos preciosas, el olivo es para estar contemplándolo durante un buen rato porque es una obra de arte, no viste por Deiá a Michel Douglas? Allí tiene la casa.Bueno pues na', bienvenido de nuevo a la península . Petons.
Hermoso viaje.
Tu, a caballo del avión de regreso y yo, si mis caballos supieran volar, como Pegaso, te enviaría unos fotos increíbles. Les pregunté, me dijeron que habían oído hablar de un antepasado suyo, pero que ellos preferían la tierra firme...
Eres viajero y no turista como dice Saramago.
No sé si te gusta comer en plan "español", pero ¿qué nos cuentas de la sobresada?
un saludo
Veo que anduviste de paseo y que lo disfrutaste, me alegro mucho.
Preciosas las fotos de tu viaje. Lo de Catedrales y Iglesias que cobran entrada: opino lo mismo.
Un abrazo y bienvenido de regreso a casa.
Peter, tú como amante de España, eres un buen viajero y desde tu tierra seguro que piensas en hacer ese viaje, si no conoces Mallorca.
Un afectuoso saludo
mjt, a mí me pasó lo mismo la primera vez que fui. Me encantó Deiá, pero no menos otros lugares.
Un saludo
Marian, yo la vi la vez anterior y también visité la cueva dels Hams (anzuelos) con unas estalastitas en forma de anzuelo, de ahí su nombre. Otra maravilla de cueva.
Un abrazo
Abu, estamos en una edad donde se puede viajar moderadamente y disfrutar de ello, cuando le gusta a uno.
Un abrazo
Geni, no he probado los tumbets, pero sí la coca. La casa de Michel Douglas no la pude visitar, creo que no recibe visitas, pero sí fui al palacete del archiduque Luis Salvador. Por cierto, nos contaron que la casa del Douglas fue regalada por Luis Salvador a una campesina mallorquina de la que se enamoró.
En Palma fui a tomar chocolate con cuartos y ensaimadas a un lugar estupendo llamado Juan del S'aigo, una cafetería de 1700. Si vas por allí y no la conoces pásate a verla y disfrutar de su chocolate y ensaimadas, está en la calle Sans. Cerca de la basílica de San Francisco.
Besos
Besos
Precioso viaje el que nos relatas, me alegro que lo pasaras así de bien, las fotos me han encantado, es uno de los sitios que quiero conocer.
Feliz semama!!!
Besitossssss
Me gusta mucho Mallorca y hace tiempo que no voy por allí. Tu entrada y tus fotos me han abierto las ganas de volver.
Un beso y me alegro de tu disfrute y de tu vuelta.
Mi querido Antonio, que bien lo has pasado en compañia de tus amigos, con tu relato provocas que agarre mis maletas, mi nena y salte el charco a mi bella y recordada Madre Patria, pensaba ir en Semana Santa pero por cosas del destino no podrá ser. Espero poder viajar a España antes del verano. Un hermoso viaje, bonitas experiencias, gratos recuerdos y bellas fotos. Un beso grandeee!!!! feliz domingo
Unas fotos muy bonitas, Antonio.Lo de cobrar en las catedrales es una vergüenza, pero también una luz para aquellos que aún creen en que los niños vienen de París (O que la Iglesia representa al Cristo, que viene a ser lo mismo)
Figúrate que por subir a pie hasta el campanario de la catedral de Cádiz te piden cuatro a cinco euros, cuando se están llevando a cabo reformas y arreglos a costa del erario público.
Y si entras en las tiendas de anticuarios (Ver Rastro madrileño, por ejemplo) te tropiezas con cuadros,cálices, candelabros e imágenes que ellos han sacado de las iglesias de muchos pueblos y aldeas para lucrarse a costa del patrimonio de todos.
Un viaje bien aprovechado el vuestro, por lo que se ve.
Un abrazo.
Veo que a sido un viaje muy beneficioso; me ha entrado ganas de conocer Mallorca .
Lo que me ha sorprendido es el pagar por entrar a ver la catedral . Nunca había pensado que se podría hacer.
Saludos desde Málaga.
Me alegro que hayas pasado unos dias felices. Un abrazo
María Jesús, has visto el precioso caballo de la foto? Nos hicieron una demostración de doma espléndida.
Un saludo
Txema, me traje sobrasada de cerdo negro mallorquín. Es estupenda y me recuerda a los desayunos que me colocaba, cuando estaba en Barcelona, a base de sobrasada con queso en plan bocata… Voy a introducir en el post una foto de un colmado cargado de productos de Mallorca.
Un saludo
Myr, me encanta viajar y escapar de los circuitos turísticos, buscando la esencia del lugar y sus encantos. Hice más de 600 fotografías que quedan para el recuerdo.
Un abrazo
Mar, no te lo pierdas, vale la pena visitar las isla. Yo no conozco el resto de las Baleares, pero están en mi agenda.
Besos
Carmen, creo que es una buena opción volver a disfrutar de esta maravillosa isla.
Besos
Circe, si puedes no lo dudes, España es inmensa en arte, arquitectura, paisajes, gastronomía y, sobretodo, su gente.
Si vienes y pasas por Málaga me lo dices y te mando el número de teléfono vía e-mail para quedar y poder saludarnos.
Besos
Juan, creo que otro campanario con entrada para subir es el de Valencia. La espiritualidad de la iglesia se ve mediatizada por este materialismo que es ostentación de poner terrenal. No me meto con la gente que cree en ella, pero es evidente que su reino es de este mundo y no del otro.
Un abrazo
Annick, también se paga en la nuestra, la de Málaga. Tiene un horario para la visita turística, con entrada y visita a sus tesoros, y otro para actos religiosos. Lo que critico, además de cobrar, es que no diferencien las exigencias del culto de las de la visita turística.
Saludos cercanos
Milagros, gracias por compartir mi alegría en el viaje.
Un abrazo
Pasaré envidia, pero pon la foto. Algo es algo.
un abrazo
Me alegro de tu viaje Antonio.Mallorca para mi es una asignatura pendiente que pienso aprobarla pronto.
Con respecto al cobro de las catedrales deciros que aunque creyente ,soy muy disidente en muchas de las actitudes de mi Iglesia y reconozco que aunque el Erario publico paga parte de algunas restauraciones no llega mucho y es necesario cobrar para mantener.De hecho en Sevilla hay templos que son maravillosas obras de arte que llevan mas de diez años esperando restauracion y los que felizmente se han restaurado(como el Salvador) ha sido gracias a los donativos ,la iniciativa privada y la propia Iglesia.En Sevilla,gracias a Dios no hay horarios diferenciados y para la oracion y el culto puedes acceder siempre que el templo este abierto.Ojo ,que no pretendo defender a nadie pero si aclarar en la medida de lo posible .Un abrazo a todo,por cierto ,¿Nos has traido una ensaimada virtual?
Sí, Juan Antonio, traje ensaimadas, hasta seis, para repartir a criterio de mi señora esposa. Las cuelgo virtualmente para disfrute y solaz de todos los visitantes.
Con respecto al cobro o no en la catedral, aclarar que, aunque no soy creyente a pesar de haber pasado por el seminario diocesano, entiendo que cobren entrada al museo, pero entonces que no exijan conductas de tipo religioso en cuanto al concepto de decoro o irreverencia, sino las propias de cualquier museo. De todas formas no me cuadra mucho eso de museo o lugar de culto... o lo uno o lo otro. El caso es que tanto ornato y obra de arte no es lo que Dios quiere del hombre, a mi modesto entender,sino otras cosas que chocan con la ostentación.
Un abrazo
Me alegro por tu viaje. Veo que te lo pasaste muy bien. Gracias por dejarnos las fotos para deleitarnos con ellas. Un abrazo muy grande y me alegro del regreso
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